“Hace tiempo que la IM no tiene un plan director de arbolado”

Eleonora Bianchi, directora de Acondicionamiento Urbano, reconoció que la Intendencia no cuenta con un plan actualizado para gestionar el arbolado en la ciudad. También se refirió a la coordinación con las empresas que realizan perforaciones en la ciudad y dijo que les ha resultado muy difícil coordinar acciones para que no se hagan pozos una y otra vez.

Actualizado: 10 de marzo de 2012 —  Por: Redacción 180

“Hace tiempo que la IM no tiene un plan director de arbolado”

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Un árbol cayó en Carrasco y mató a una mujer de 35 años que manejaba su auto. Una semana después, una columna antigua y en desuso de Trolley se desplomó en Pocitos, en Bulevar España. Los montevideanos tuvieron una extraña sensación de inseguridad y llenaron los medios de comunicación y el sector de quejas de la Intendencia con sus reclamos por árboles o columnas en mal estado. Los técnicos desde la Academia comenzaron a cuestionar también a la Intendencia por su falta de planes y de criterio.

La Directora de Acondicionamiento Urbano, Eleonora Bianchi. Bianchi, entrevistada en No toquen nada (Océano FM).

Joel Rosenberg: Imagino que fue un mes extraño para ustedes en la Intendencia.

Sin duda, en particular por la situación que se planteó el 30 de enero y que tuvo un desenlace fatal. En realidad, las caídas de árboles y de columnas es una cosa que ocurre habitualmente. Lo que no ocurre es con estas características. En el caso particular de los árboles, en 2005 tuvimos un temporal muy importante. Fue el año en el que cayó la mayor cantidad de árboles. En este momento estábamos estabilizados en el entorno de los 200 árboles que por distintas causas caen en la ciudad. Pero se dio esa situación fatal, en la que no tenemos respuesta para dar a la familia. Desde ese punto de vista humano es irreparable y desde otro punto de vista, las responsabilidades que nos correspondan serán asumidas.

JR: Enseguida de lo que pasó con la mujer se dio una situación con una columna también. La sensación es que a partir de eso la gente se empezó a fijar en árboles y columnas como nunca y a denunciar. ¿Cómo manejaron esa sensación de inseguridad?

En ambos casos, tanto en los árboles como en las columnas, veníamos trabajando. Tenemos un plan que está vinculado al arbolado por el cual estamos retirando, año a año, en el entorno de los 1.000 árboles. Una ciudad tan grande como esta tiene en total, entre árboles alineados en veredas y parques 400.000 árboles. Es permanente la acción sobre ellos, más allá de que los municipios han estado con unos planes muy activos en poda al igual que nosotros. A lo largo del año 2011 se habían invertido 5.000.000 de dólares en arbolado, o sea que es un área en la que trabajamos.

JR: ¿El presupuesto alcanza?

Ahora está tendiendo a ser suficiente. Hubo algunos periodos en el que el presupuesto de áreas verdes fue menor. Eso generó retrasos. Por suerte, hace por lo menos tres años que el presupuesto comenzó a estabilizarse y a partir de 2011 nosotros más que duplicamos el presupuesto del arbolado.

JR: En el caso de Carrasco había un hongo, que según el informe de la Facultad de Agronomía, “solo puede ser visto por una tecnología como el geo-radar”. ¿La Intendencia descubre que existe la tecnología del geo-radar recién ahora?

No creo que no lo supiera la gente especialista en arbolado. Hasta el momento la práctica del mantenimiento del arbolado era la inspección ocular y en algunos casos, cuando era necesario, algún otro tipo de técnica pero no tan avanzada. En realidad, las técnicas más adelantadas, geo-radar u otro tipo de elementos de ese estilo, están en pleno desarrollo.

JR: ¿Los técnicos explicaron por qué no la habían aplicado antes?

El año pasado conocieron parte de la tecnología de geo-radar en un congreso en Brasil y también otras tecnologías por el estilo. En el país, en este momento, hay geo-radar en una empresa particular, que es la que hicimos la compra del servicio en este momento y también Facultad de Ingeniería que se ha puesto en contacto con nosotros para ofrecerlo. Pero no es una práctica extendida. Tenemos que hacer un convenio. Sale 15.000 pesos más IVA por día, pero en realidad la decisión que nosotros tomamos fue contratarlo con un periodo de seis días con la posibilidad de ampliarlo. Esto a los efectos de ver si nos resulta conveniente y está bueno comprar esa tecnología u otra que nos sea de utilidad.

JR: Graciela Romero, ingeniera forestal y docente de Protección Forestal en la Facultad de Agronomía, que además hizo el estudio del árbol que cayó en Carrasco, nos dijo que “no es sólo comprar los aparatos, es comprarlos y capacitar gente”. ¿Están capacitando al personal?

Claro. En realidad, la empresa que contratamos hace el trabajo en su conjunto. Obviamente están trabajando también técnicos nuestros. Pero la idea que tenemos y que ya hemos ido consultado es que si bien cuando definamos la compra del geo-radar u otra herramienta de este estilo, también se contrata la capacitación. En esta última semana Facultad de Ingeniería nos hace una propuesta en la que podrían estar colaborando con nosotros en ambos sentidos.

JR: Usted habló de la responsabilidad, del juicio civil, de lo que ya dijo la Intendencia a través de su Secretario General, Ricardo Prato. Más allá de lo que puede ser una instancia judicial, a la interna de la Intendencia, ¿habrá una investigación interna?

Por supuesto. Son investigaciones administrativas. Inmediatamente que ocurre la situación, nosotros recogemos toda la información y se sustancia en un expediente que pasa a Jurídica para su análisis. Hay que determinar si se tomaron las decisiones en los momentos correspondientes o no. Eso es habitual, se realiza siempre que tenemos alguna dificultad. Además no olvidemos que la Intendencia de Montevideo tiene un órgano de control que es la Junta Departamental, a quien también nosotros le damos la información. En este caso, recibió la información primero la Junta Departamental que la propia jurídica.

JR: Hay 200.000 árboles en la calle y otros 200.000 en espacios públicos. ¿Por qué cuando fueron a la Junta hablaron solo de los que están alineados en las calles?

Esos son los que tienen las mayores posibilidades de generar conflictos con la ciudad. Nosotros defendemos que haya árboles en la ciudad, creemos que es necesario, pero sabemos también que todos los servicios que pasan por el subsuelo afectan las raíces. Nosotros tenemos tendidos de fibra óptica, gas, OSE, UTE y el propio alumbrado público. Todas esas cosas conviven en el subsuelo con las raíces de los árboles. Por lo tanto, debemos cuidar mucho lo que pasa con los árboles que están alineados en vereda. Son los más agredidos de alguna manera.

JR: Una de las investigaciones que hicieron en el caso de Carrasco fue para ver si se había excavado allí. ¿Es uno de los problemas grandes que tiene la ciudad que pase la fibra óptica primero, el gas después y se hace el pozo, se tapa, viene otro y vuele a hacer el pozo?

Sin duda. Nosotros tenemos otro servicio que se llama Unidad de Control de Redes en Vía Pública. Tenemos un conjunto de inspectores y de técnicos que están controlando permanentemente. En los últimos tiempos hemos hecho convenios con varias empresas para que, por ejemplo, cada vez que se coloca fibra óptica se coloque un triducto o dos triductos. De esa manera quedan habilitadas otras vías y no hay que hacer nuevamente intervenciones. Lo mismo hicimos cuando se instaló todo el gas nuevo en Ciudad Vieja.

JR: ¿Pero es imposible coordinar el gas con la fibra óptica, por ejemplo?

Nos ha resultado muy difícil.

JR: ¿Cuál es la dificultad? Porque el vecino se vuelve loco, porque ve que le tapan y al otro día viene otro y le destapa en el mismo lugar.

Exacto, no sólo se vuelve loco el vecino, se estropean muchísimo las veredas. Es un costo enorme, no resulta fácil, más allá de que se está trabajando en eso. La coordinación de las distintas empresas tanto públicas como privadas para que sus acciones sean conjuntas. De todas maneras somos nosotros quienes damos los permisos y lo que aseguramos es el control. Si no se solicita el permiso, ponemos las multas que corresponden, obligamos a que se hagan los permisos y demás. Lo más importante es que se cumplan los plazos.

JR: ¿Hay un plan de la Intendencia para el arbolado? Porque la Academia no lo ve o por lo menos tiene muchas críticas al respecto.

Decir que no hay un plan no corresponde. Lo que podemos decir es que el plan no está actualizado. En eso tienen razón y creo que es una cuestión que ya tenemos planteada. Un plan director no hay, hace tiempo que no lo tiene la Intendencia y nosotros entendemos que es necesario hacerlo. Es más, está planteada la realización. No van a ser funcionarios exclusivamente al servicio de Áreas Verdes, porque en realidad ingenieros agrónomos tenemos en varias reparticiones municipales como los que trabajan el Jardín Botánico y en Escuela de Jardinería. La Intendencia de Montevideo es la principal formadora de técnicos en jardines. Seguramente en un año se van a ver los primeros avances.

JR: Después de la situación en Carrasco, se cayó la columna en Pocitos. Usted en ese momento asumió la responsabilidad inmediata: “Es un tema que nosotros debimos haber tenido en cuenta”.

En este momento hay unas 2.000 columnas aproximadamente de metal en la ciudad.

La Intendencia de Montevideo tiene desde los años 60 la responsabilidad del alumbrado público en la ciudad. En la ciudad ya había columnas, de los Trolley y también de UTE, que en aquel momento pasaron a nosotros. Esas columnas están siendo recambiadas. Cuando están en condiciones las limpiamos, las pintamos y se mantienen. Pero otras están corroídas, por lo tanto a esas hay que retirarlas. Ya teníamos una licitación que estaba trabajando y además nosotros hacemos algo de Mantenimiento Preventivo.

JR: ¿Eso fue lo que falló?

Claro, por eso yo dije: “Esto lo debíamos haber visto antes”. Nosotros no teníamos planteado en la planilla que teníamos un problema con esa columna. Ahí hay un error.

JR: ¿Y hay una investigación también por ese error?

Por supuesto.

JR: ¿Se activó más rápidamente toda la investigación de otras columnas por las dudas que haya otros errores?

Como nosotros ya veníamos trabajando en eso, lo que hicimos fue dedicarnos a pleno a trabajar en eso. Incluso si ustedes por ejemplo transitan por la rambla de Montevideo, pueden ver que estamos retirando columnas y colocando nuevas, pero no lo estamos haciendo solo en la rambla. Lo que hicimos fue determinar cuáles eran las más riesgosas y sobre ellas trabajar inmediatamente. En más de un lugar de la ciudad estamos extrayendo columnas. Las más riesgosas para que se caigan son las de hierro, porque las de hormigón se caen a partir de un choque o una tensión, mientras que las de hierro se pueden desplomar como se desplomó ésta.