Mujica fue interpelado en la residencia del embajador argentino, donde asistió a los actos por el aniversario de la Revolución de Mayo, por la periodista argentina Claudia Acuña, quien está realizando un documental sobre los argentinos desaparecidos en Uruguay en el marco del Plan Cóndor, de coordinación represiva de las dictaduras del Cono Sur.
"No sé" si habrá justicia en esos casos, dijo Mujica. "Yo hago lo que puedo pero no soy adivino. Y no puedo poner a nadie arriba de una plancha y torturar", añadió.
"¿Usted cree en la justicia absoluta?", añadió, ante la insistencia de Acuña. "La justicia no existe, existen los trajes sociales, existe la fuerza, los hombres inventamos una cosa que se llama justicia y está bien. Y si no existiera no podríamos convivir. Pero tiene limitaciones y la limitación es la verdad".
El mandatario cuestionó a "la gente que tiene la verdad (y) no la dan", en referencia a los militares y policías que torturaron y asesinaron durante la dictadura.
"Estuve 14 años preso y tuve muchísimas cosas pero no ando odiando a nadie", enfatizó el mandatario.
Su último período de detención duró 13 años, de los cuales la mayor parte las pasó en condiciones infrahumanas como uno de los dirigentes tupamaros que la dictadura tomó como "rehenes", lo que significaba que serían ejecutados si su organización retomaba las acciones armadas.
En un breve discurso en la embajada, Mujica volvió a solidarizarse con el reclamo argentino por las islas Malvinas, al pedir el fin del "colonialismo" en América Latina, y abogó por la unión de los países latinoamericanos.
"No son épocas de colonialismo", precisó el mandatario uruguayo.
Tras el acto en la embajada Mujica mantuvo un largo encuentro con el embajador Dante Dovena y el músico Miguel Angel Estrella, quien estuvo más de dos años preso en Uruguay durante la dictadura.
