El planteamiento llegó desde el Ministerio del Interior directamente a la intendenta Ana Olivera. “El gabinete municipal estuvo considerando el tema y entendió que lo mejor que se podía plantear era que trabajaran en la limpieza del costado de los caminos vecinales que tienen pastizales altos, cunetas, que en realidad requieren mucho trabajo y es un trabajo típicamente manual”, dijo Prato.
Prato dijo que los presos “son ciudadanos que cometieron infracciones legales y que están cumpliendo su reclusión en el entendido de que debemos rehabilitarlos”, por lo que las tareas que realizarán serán las adecuadas “para tomar un hábito de trabajo”.
El ministerio será quién resuelva qué presos van a salir a trabajar, qué herramientas utilizarán y cuál será el personal que los custodie. “No tenemos fecha definida” para comenzar con los trabajos, dijo Prato.
La remuneración para los presos que trabajan la definirá el ministerio. Prato aseguró que “no está planteado hasta ahora que la intendencia tenga que aportar dinero" para esa remuneración.