Medios y niñez: corregulación entre "buenos padres de familia"

Este jueves se presentó el documento con las recomendaciones finales del Comité Técnico Consultivo sobre Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, Libertad de Expresión y Medios de Comunicación. Los participantes destacaron el diálogo que se logró a pesar de las diferencias. Desde Andebu, Fernando Vilar dijo que muchas de las sugerencias ya están en práctica porque los jefes de los informativos son "buenos padres de familia".

Actualizado: 26 de noviembre de 2012 —  Por: Redacción 180

Medios y niñez: corregulación entre "buenos padres de familia"

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Por primera vez en Uruguay gobierno, empresarios, trabajadores y sociedad civil discutieron sobre responsabilidad y regulación en los medios de comunicación. El Comité Técnico Consultivo sobre Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, Libertad de Expresión y Medios de Comunicación entregó este jueves al Poder Ejecutivo sus recomendaciones finales.

En el documento se establece la corregulación en publicidad y periodismo, para que haya normativas claras desde el Estado pero también mecanismos de control desde los medios. Se elaboraron una serie de recomendaciones sobre cómo deben programarse los contenidos potencialmente nocivos para los niños y se propone regular la publicidad dirigida a niños y adolescentes.

También se recomienda fomentar la programación infantil y que en la educación formal se enseñe a decodificar los mensajes de los medios de comunicación.

El trabajo no es vinculante, pero logra plasmar un documento (amparado por Unesco y Unicef) en donde participaron casi todos los actores de la comunicación.

En las reuniones del CTC participaron representantes de la Agencia de Comunicación por la Infancia y la Adolescencia Voz y Vos, la Asociación Nacional de Broadcasters Uruguayos (ANDEBU), la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU), la Asociación Uruguaya de Agencias de Publicidad (AUDAP), la Cámara Uruguaya de Agencias de Medios (CUAM), la Coalición por una Comunicación Democrática, Comunicaciones de la Intendencia de Montevideo (Tevé Ciudad), la Dirección Nacional de Telecomunicaciones y Servicios de Comunicación Audiovisual, Ministerio de Industria, Energía y Minería (DINATEL), el Instituto del Cine y Audiovisual del Uruguay (ICAU), el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), el Ministerio de Educación y Cultura (MEC), la Secretaría de la Presidencia de la República, Televisión Nacional Uruguay (TNU), Televisoras Abiertas del Interior (TAI), UNICEF, UNESCO, la Universidad de la República (Licenciatura en Ciencias de la Comunicación) y las universidades privadas.

“La metodología ha sido existosa y marcó una continuidad en este sentido con el Comité que trabajó ya hace más de dos años en la elaboración de una ley de servicios de comunicación audiovisual. Creo que recién ahora podemos estar tomando conciencia del abordaje que en otros países de la región ha sido motivo de polarización y de exclusión. En este caso ambos procesos se han culminado con la inclusión de todos los actores y la posibilidad de que todos opináramos abiertamente”, dijo el periodista Edison Lanza de la Coalición por una Comunicación Democrática.

En ese marco, fue extraña la participación de Andebu. La asociación que nunclea a los canales y a muchas radios envió un periodista, el conductor del informativo de Canal 4, Fernando Vilar. Entonces quedó como representante empresarial un trabajador.

Vilar fue centro de atención, sobre todo cuando se discutió sobre imágenes violentas en televisión. Pero todas las fuentes consultadas por No toquen nada reconocieron la buena voluntad de Vilar para trabajar y aceptar la regulación de los medios.

Vilar habló de la autorregulación que ya existe desde un punto de vista extraño.

“Casi todo las cosas que se han enunciado como objetivos a cumplir, y por eso está bueno que se intente corregular, ya está siendo puesto en práctica por la mayoría de los medios de comunicación, sobre todo los audiovisuales: en términos de violencia, de lenguaje, de sexo, de discriminación. Simplemente por aquello de que casi todos los jefes de informativo son buenos padres de familia como dice el Código Civil”, señaló Vilar.

Las recomendaciones

El Comité Técnico Consultivo sobre la protección y promoción de los derechos de los niños y adolescente en los medios de comunicación entregó al Poder Ejecutivo sus recomendaciones finales.

En el documento se establece una serie de recomendaciones sobre cómo deben programarse los contenidos potencialmente nocivos para los niños y se propone regular la publicidad dirigida a niños y adolescentes. También se recomienda fomentar la programación infantil y que en la educación formal se enseñe a decodificar los mensajes de los medios de comunicación.

Contenidos

El Comité recomendó que el horario de protección a los niños para televisión y radio comience a las 6 de la mañana y finalice a las 22 horas, y que los contenidos que se emitan inmediatamente antes o después de esos horarios respeten un criterio de progresión (es decir, cuanto más presencia de contenidos potencialmente nocivos más lejana debe ser su exhibición de los límites inferior y superior del horario de protección).

También se recomienda el uso de símbolos universales que avisen sobre la clasificación del contenido según franjas etarias (de 0 a 6 años, hasta 13 años y hasta 18 años).

El Comité aprobó por consenso una clasificación de contenidos que recomienda no sean emitidos dentro del horario de protección a los niños.

Por ejemplo, de tomar en cuenta la recomendación, los canales de televisión y las radios no deberán incluir violencia excesiva, truculencia, pornografía, exhibición de consumo explícito de drogas legales e ilegales y tampoco se deberá usar un lenguaje que explicite de manera reiterada y abusiva esos contenidos, dentro del horario de protección.

Programación infantil

El comité aprobó por unanimidad que se recomiende establecer cuotas de programación infantil con un mínimo de producción nacional en los medios públicos. Pero no logró consensuar respecto a cuotas de programación infantil, con un mínimo de producción nacional, para los medios privados.

“Parte de los miembros del CTC subrayaron su apoyo a esta recomendación y parte de los miembros no la aprobaron señalando que defienden la libertad de programación de las emisoras privadas, pero al mismo tiempo, reconociendo la necesidad de ampliación de la presencia de programas infantiles de calidad en los canales privados”, dice el texto.

También se recomendó que se reevalúen los mecanismos de financiación existentes para la producción audiovisual para que incluyan estímulos a la generación de programación infantil de calidad.

Publicidad

En cuando a la publicidad se recomendó prohibir la publicidad no tradicional o "chivos" en los programas infantiles. Además que el sector privado –las agencias de publicidad, medios y anunciantes- establezcan mecanismos de autorregulación que permitan reclamos directos de las personas (los mecanismos actuales no permiten que las personas hagan denuncias). También se recomienda al INAU aplicar efectivamente el Código de la Niñez en materia de publicidad y que el gobierno involucre al área de Defensa del Consumidor.

Sobre la regulación de la publicidad no hubo consenso y se presentaron dos propuestas de regulación.

Una que se inclina por prohibir la publicidad en el horario de la programación infantil y prohíbe toda la publicidad dirigida a niños menores de 12 años. “Esta propuesta tuvo un importante apoyo en el CTC, pero no logró el acuerdo de la totalidad de sus integrantes”, se informa.

La otra propuesta se inclina por un modelo menos restrictivo, con 15 medidas concretas. Por ejemplo, se define un criterio para el tiempo máximo de exhibición de publicidad en los programas infantiles; se restringe la publicidad de productos prohibidos para menores de 18 años; las figuras, muñecos de los programas infantiles no pueden aparecer en la publicidad; los niños menores de 13 años no pueden recomendar y ofrecer testimonio que respalden productos; y otras medidas, como que la publicidad no puede apelar directamente a los niños.

Educación para los medios

El comité recomienda que la educación para los medios esté presente en las políticas públicas educativas, particularmente en la formación de profesores.

Códigos de ética – autorregulación

El comité propuso la adopción de un modelo de corregulación, es decir, la imposición de algunas regulaciones generales, pero también incentivar que los medios (el sector empresarial) y los periodistas (sector de los trabajadores) tengan sistemas de autorregulación y que ofrezcan un mecanismo para que la ciudadanía pueda hacer reclamos.

El comité recomendó que todas las gremiales y asociaciones de medios de todas las plataformas tengan sus códigos de ética, los cuáles deberían ser públicos, transparentes y contender instrucciones para que aquellos que entiendan que estos códigos no están siendo respectados puedan plantear sus quejas.

Pero también se recomienda que exista un mecanismo colectivo que sirva para todos los medios, al cual las personas puedan acceder y hacer reclamos en forma directa.

“Hay que retrotraerse tres o cuatro meses atrás cuando había temor de que esto fuera motivo de un desborde regulatorio, una polémica instalada en los medios de comunicación y cierto atisbo de polarización en este tema. Dos meses y pico después, con el producto arriba de la mesa, creemos que hemos sido capaces de lograr algunas soluciones equilibradas. Notoriamente se respeta el derecho a informar de los periodistas y los medios pero también se toma en cuenta el interés superior de niños, niñas y adolescentes. Tenemos que operar a partir de esta definiciones un cambio cultural no represivo”, afirmó Lanza.

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