Recomiendan a gobiernos latinoamericanos hacer cumplir derechos sexuales y reproductivos

El Grupo de Trabajo de Alto Nivel de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (CIPD) recomendó a los gobiernos de América Latina y el Caribe intensificar la voluntad política y las inversiones para avanzar en igualdad de género y empoderamiento de las mujeres, los derechos y el empoderamiento de los adolescentes y los jóvenes, y la salud y derechos sexuales y reproductivos de todos.

Actualizado: 13 de agosto de 2013 —  Por: Redacción 180

Recomiendan a gobiernos latinoamericanos hacer cumplir derechos sexuales y reproductivos

Sin datos (Todos los derechos reservados)

El Grupo de Trabajo hizo cuatro recomendaciones e instó a los gobiernos a incorporarlas como objetivos y metas específicas tanto en la agenda regional para El Cairo después de 2014 como en la nueva agenda mundial para el desarrollo post 2015.

La primera refiere a "respetar, proteger y hacer cumplir los derechos sexuales y reproductivos mediante la reforma de leyes, normas y políticas y campañas de educación pública y movilización comunitaria en materia de derechos humanos"; la segunda es "acelerar los esfuerzos por lograr el acceso universal a información, educación y servicios de calidad, integrales e integrados, en materia de salud sexual y reproductiva"; la tercera "asegurar el acceso universal a la educación integral en sexualidad para todos los jóvenes, dentro y fuera de las escuelas" y la cuarta es "eliminar la violencia contra las mujeres y las niñas y lograr el acceso universal a servicios fundamentales para todas las víctimas y sobrevivientes de la violencia de género".

El Grupo de Trabajo realizó este llamado en una conferencia de prensa celebrada en el marco de la Conferencia Regional sobre Población y Desarrollo, organizada por la CEPAL, el gobierno uruguayo y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), que reúne a autoridades gubernamentales de la región con el fin de evaluar los avances logrados en la aplicación del Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo celebrada en El Cairo en 1994 y trazar el camino para la CIPD después de 2014.

Estas recomendaciones de políticas para avanzar en la aplicación de la CIPD en América Latina y el Caribe fueron presentadas por dos miembros del Grupo de Trabajo de Alto Nivel para la CIPD: Mariela Castro, directora del Centro Nacional de Educación Sexual de Cuba, y Alessandra Nilo, directora y cofundadora de la ONG brasileña Gestos y secretaria regional de LACCASO (Consejo Latinoamericano y del Caribe de organizaciones no gubernamentales con servicios en VIH/Sida). También participaron de la conferencia de prensa Mirta Marina, Coordinadora del Programa Nacional de Educación Sexual Integral del Ministerio de Educación de la Nación en Argentina, y Juan Camilo Saldarriaga, miembro de la Asociación Demográfica Costarricense, organización que integra la Federación Internacional de Planificación de la Familia.

"No lograr el disfrute pleno de la salud y los derechos sexuales y reproductivos en nuestra región ha tenido consecuencias graves”, afirmó Nilo, y señaló que cada año en América Latina y el Caribe se producen 8.800 muertes maternas por causas en su mayoría evitables; 23 millones de mujeres no pueden evitar embarazos no deseados porque no utilizan métodos anticonceptivos modernos; y se practican 4,2 millones de abortos en condiciones inseguras, que resultan en 1.000 muertes y un millón de hospitalizaciones, con un costo de más de 130 millones de dólares para los sistemas de salud de la región.

Además, el 36% de las mujeres de la región sufrieron violencia física y/o sexual en algún momento de su vida, la mayoría a manos de sus parejas. Y como en muchas otras regiones del mundo, quienes más sufren la discriminación y padecen las consecuencias más nefastas de la desigualdad y de la desatención de los derechos sexuales y reproductivos son las mujeres y los adolescentes que viven en la pobreza, los migrantes, los afrodescendientes, los pueblos indígenas y las poblaciones rurales.