"No se huele, no se oye, no se ve"

"Aire" es una obra de teatro para bebés de 0 a 3 años. Un espectáculo que busca sensibilizar a su público y estimular los sentidos a través del trabajo con un elemento que, aunque "no se huele, no se oye, no se ve", forma parte de la vida diaria de todos las personas.

Actualizado: 04 de agosto de 2014 —  Por: Redacción 180

Los niños entran a la obra junto a sus padres.
Algunos se sientan a upa, mientras otros se acomodan en su propia silla.
La edad promedio no supera los dos años, sin embargo se hace un profundo silencio cuando las luces se apagan.
Empieza la obra.
"Aire", es teatro para bebés, un espectáculo que como cualquier otro busca estimular los sentidos.
A través de la música, los movimientos y las luces, los actores proponen un juego en el que el aire es el protagonista principal y para eso utilizan elementos que resultan familiares para su público.
Un elemento que está en las cosas más sencillas, pero "no se huele, no se oye, no se ve", dice una canción durante el espectáculo.
Muestran al aire en sus muchas versiones.
Con el sonido de respiración reproducido por un acordeón y reflejado en un espejo; con la risa, la tos y los estornudos; con el viento de un molinete y el de un abanico; y con un montón de otras acciones que los pequeños imitan tras los actores.
Algunos responden con sus palabras, otros con simples muecas.
"Una vez metido en la creación, me di cuenta del punto de reencuentro con la totalidad del ser humano.
Ver en la platea seres de 6 meses hasta 3 años, con su inocencia y su estado de pureza y capacidad de asombro, es conmovedor", expresó a 180 el director de la "Aire", Fernando Toja.
Toja contó que esta era su primera vez con el teatro para bebés y que antes de ser convocado para dirigir la obra no sabía que existían estas "experiencias teatrales".
"Aire" forma parte de un ciclo de obras que pretende abarcar los cuatro elementos.
En 2012 se estrenó en Montevideo "Agua" y quedan pendientes la tierra y el fuego.
La propuesta que busca sensibilizar a los padres e incentivar la capacidad de descubrir que tienen los niños.
"Lo que planteamos es que en 30 minutos se logre un estado de sensibilidad con un juego expresivo simple, con imágenes y sonidos que conecten con los bebés.
También hay reacciones en los adultos, donde sus mirar a veces es desde el mismo lugar que miran los bebés", relató Toja.
El director aseguró que las exigencias a la hora de hacer teatro para niños son las mismas que en un espectáculo para adultos.
"Lo que cambia es el propósito.
El objetivo.
Pero la calidad y la entrega tiene que ser la misma.
La excelencia por sobre todas las cosas", afirmó.
Una vez que termina el espectáculo, los actores invitan a los niños a pasar al escenario para tomar contacto con los distintos objetos que aparecieron y cantar juntos una canción.
La obra estará en cartelera todos los sábados de abril, a las 16 horas, en la Sala Antonio Larreta del Lawn Tennis.