Más vale tarde que nunca

Nacional derrotó a Defensor 2 a 0 con goles de Carlos De Pena y Juan Cruz Mascia. Al fin apareció el equipo de Pelusso que jugó su mejor partido en el Clausura con un gran Rinaldo Cruzado como figura. Escuchá los goles en #futbolx180.

Actualizado: 04 de agosto de 2014 —  Por: Redacción 180

Más vale tarde que nunca

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Precisaba Nacional demostrarse a sí mismo que era capaz de luchar hasta el final.
Y para hacerlo necesitaba ganar un partido importante.
Es por eso que la victoria contra Defensor tiene mucha importancia.
Y más trascendente lo es si se analiza el juego.
Porque el Tricolor mostró su mejor versión en lo que va del 2014 y se llevó los puntos de manera incuestionable.
Precisaba Pelusso encontrar el equipo.
Y el técnico se tiene que haber ido del Parque con la certeza de que el cuadro que jugó contra Defensor es el más parecido al titular.
Tal vez falte algún nombre, el caso de Iván Alonso e Ignacio González son los más evidentes, pero no más que eso.
El trabajo colectivo sobresalió en una oncena que además tuvo grandes rendimientos individuales.
Sebastián Coates en el fondo y Cruzado fueron los mejores, acompañados por Gustavo Munúa que atajó lo poco que le tiraron.
El zaguero jugó y ordenó mientras que el volante puso los dos pases de gol y clarificó el juego ofensivo.
Con esos atributos Nacional se superó ampliamente respecto de la raquítica versión que venía mostrando desde hacía demasiados partidos.
La principal virtud del equipo fue olvidarse del pasado.
Salió como ni nada hubiese ocurrido en el último tiempo y no demostró apuros para manejar el balón.
Plantado en campo rival y sin saltearse sectores del campo de juego, buscó el arco de Campaña.
Cruzado por el medio, De Pena por el extremo izquierdo y Gastón Pereiro por el derecho fueron las opciones para trasladar la pelota hacia adelante.
Pero lo más destacado fue que Nacional intentó salir jugando siempre, si no podía avanzar la tocaba hacia atrás para volver a empezar e incluso Munúa fue un jugador de campo más para iniciar los ataques.
El primer gol fue una muestra del procedimiento utilizado por Nacional para atacar.
La tocó Coates desde el medio hacia atrás, Munúa empezó otro ataque, Cruzado puso un pase fantástico y De Pena marcó el 1 a 0 a los 30 minutos.
Gol de De Pena en #futbolx180Defensor planteó otro partido.
Con la velocidad de Giorgian De Arrascaeta, Felipe Gedoz y Matías Alonso y la inteligencia para desplazarse y mover el balón de Nico Olivera, intentó correr la cancha para atacar de contragolpe cada vez que recuperaba la pelota.
Pero no le salió bien porque Nacional se paró bien y casi nunca quedó desacomodado.
Lució concentrado Ismael Benegas, quien anticipó una y mil veces, y Coates mandó con su aplomo y seguridad.
Pareció el violeta confundido por su rival y cansado por el esfuerzo de jugar la Copa, por lo que a pesar de que buscó adelantarse en el campo casi nunca lo consiguió y cuando lo pudo hacer chocó con Munúa.
La segunda mitad fue similar a la primera aunque con más golpes y discusiones.
Sin juego, Defensor se enfocó en un arbitraje que no tuvo incidencia en el resultado del partido.
Nacional mantuvo la postura en el campo y el control del juego.
Sobre los 13, cuando Curutchet sumaba delanteros para tratar de empatarlo, Cruzado puso otro pase de gol para que Mascia liquidara.
Gol de Mascia en #futbolx180La diferencia de dos goles fue abismal en un partido en el cual quien debía remontarlo se mostró incapaz en todo momentos de lastimar a su adversario.
Entre los intentos frustrados de Defensor y la tranquilidad de tener el partido bajo control de Nacional transcurrió el último tramo del juego.
Sobre el final Nicolás Correa tuvo una entrada descalificadora sobre Rafael García y vio la roja.
Fue un resumen de lo que mostró Defensor en el Parque.
Desorientado, malhumorado, rústico.
Nacional salió del pozo.
Precisaba una victoria para recuperar la autoestima e imaginar con mayor optimismo el futuro, que tiene el clásico a la vista.