"Guerra fría" entre la OTAN y Rusia sobre Ucrania

Rusia advirtió el martes que hará frente a la "amenaza" que supondrá el incremento de presencia militar de la OTAN cerca de sus fronteras, y acusó a los occidentales de alimentar una escalada en el conflicto de Ucrania.

Actualizado: 02 de setiembre de 2014 —  Por: Redacción 180

"Guerra fría" entre la OTAN y Rusia sobre Ucrania

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El plan que la Alianza adoptará esta semana en una cumbre "demuestra que los líderes de Estados Unidos y la OTAN quieren continuar con su política de exacerbar las tensiones con Rusia", denunció Mijail Popov, secretario adjunto del Consejo de Seguridad Nacional de Rusia, a la agencia Ria Novosti.

En su cumbre del jueves y el viernes de la OTAN en Gales, los líderes de la Alianza prevén adoptar un plan de acción (Readiness Action Plan) para dar seguridad a los aliados del este, que ven más que nunca a Rusia como una amenaza por el conflicto en Ucrania.

La OTAN enviará una "fuerzas de reacción extremadamente rápida capaz de desplegarse en un plazo de tiempo muy breve", indicó el lunes el secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen.

Según The New York Times, los 28 países de la OTAN crearán una fuerza de 4.000 hombres capaz de replicar en 48 horas a cualquier movimiento de tropas rusas en el este de Europa.

Popov reaccionó a las intenciones de la OTAN al afirmar que cuando se actualice este año la doctrina de defensa de Rusia "entre las amenazas militares extranjeras" se incluirá el plan de la OTAN de ampliar su presencia "en nuestra frontera".

"Se evalúa el papel de Rusia de forma no objetiva por los acontecimientos en Ucrania, se sacan conclusiones incorrectas y se adoptan medidas inadecuadas", deploró el responsable ruso.

Ventaja para los separatistas

Las fuerzas separatistas prorrusas parecen estar superando militarmente de forma clara al ejército regular ucraniano en el este de Ucrania, donde, según acusa Occidente, Rusia les ha enviado tropas de apoyo.

El conflicto armado en el este de Ucrania ya dejó cerca de 2.600 muertos desde mediados de abril.

El presidente ucraniano Petro Poroshenko pidió explícitamente una "ayuda" a Occidente y "decisiones cruciales" de la OTAN.

Ucrania anunció además que iba a retomar su proceso de adhesión a la Alianza Atlántica, anulado por el anterior gobierno prorruso de Kiev.

En este contexto, el presidente estadounidense, Barack Obama, viaja el miércoles a Estonia, ex república soviética, con un objetivo: advertir al presidente ruso Vladimir Putin contra cualquier tentación de atacar a un país de la OTAN, por pequeño que fuera.

Obama asistirá el jueves y viernes a la cumbre de la OTAN en el Reino Unido, donde tiene previsto un encuentro con el presidente ucraniano.

¿Tomar Kiev en dos semanas?

En este clima de guerra fría, el Kremlin denunció este martes la publicación en la prensa italiana de declaraciones "sacadas de contexto" de Putin --citadas por José Manuel Barroso, presidente saliente de la Comisión Europea-- afirmando que Rusia podría tomar Kiev "en dos semanas".

"Es inapropiado" declaró Yuri Uchakov, consejero del Kremlin. "Va más allá de las prácticas diplomáticas, no es digno de una personalidad política seria", dijo.

En un artículo en La Repubblica, Barroso indica que Putin no quiso responder a sus preguntas sobre la presencia de soldados rusos en Ucrania y se mostró amenazante: "Si quiero, en dos semanas tomo Kiev".

"Que esas palabras hayan sido pronunciadas o no, creo que esas declaraciones han sido sacadas de contexto y tenían un significado totalmente diferente", denunció Uchakov.

Sin embargo, el alarmismo y el temor imperan en Ucrania donde el ministro de Defensa, Valeri Geletey afirmó el lunes que "desde la Segunda Guerra Mundial, no se ha visto en Europa una gran guerra como la que ha llegado al umbral de nuestra puerta. Desgraciadamente, las pérdidas en una guerra así no se medirán en cientos, sino en miles y decenas de miles" de víctimas, afirmó.