El coordinador programático y doctor en filosofía, Pablo Da Silveira, fue el primero en hablar durante la presentación de la agenda de gobierno 2015-2020 del Partido Nacional.
En entrevista con No toquen nada, Da Silveira reconoció que la agenda tiene el mismo eje que el Partido Colorado, con su enfoque hacia el “desarrollo humano”. “Cuando Luis Lacalle acepta ser el candidato del sector Todos y no del ala herrerista para pelear las internas, hablamos de que el desafío era convertir el desarrollo económico en desarrollo sustentable. Creo que todos coincidimos en eso, las discrepancias están en el cómo llevar esas ideas a los hechos”, expresó.
Además, Da Silveira explicó por qué en el capítulo de reformas legales no se menciona la baja de edad de imputabilidad. “No está porque esto es una agenda de gobierno y eso es un plebiscito que se hace antes, la agenda dice lo que uno va a hacer cuando se asuma el gobierno, la baja va a ser un dato: sí o no. No es una medida de gobierno”, aclaró.
Sin embargo, en la papeleta que propone la reforma constitucional se establece más autonomía para el sistema penal adolescente. El coordinador dijo que la agenda de Lacalle Pou se puede orientar dependiendo del resultado. “Hay grandes líneas que se pueden orientar si sale el sí o el no. Pero no es un tema que corresponda incluir en la agenda porque a eso no lo resuelve el gobierno, lo resuelve la gente”, agregó.
Respuesta a críticas, “después de tantas semanas callados”
Da Silveira, durante la presentación, destacó la conformación de la fórmula de unidad en su partido y luego comenzó a contestar las críticas recibidas.
“Lo que hoy estamos festejando es el cumplimiento del cronograma de trabajo que nos habíamos propuesto. Exactamente en los plazos que dijimos que lo íbamos a hacer. Lo curioso es que mientras hacíamos todo esto nos llovían las críticas, como si estuviéramos haciendo las cosas muy mal, a algunos les hubiera gustado criticar nuestros procedimientos y tratarnos de antidemocráticos. Pero como nuestro procedimiento fue transparente y abierto, nos empezaron a criticar por otras cosas. Primero, algunos fingieron creer que las líneas estratégicas aprobadas en la convención eran el programa y era 'cortito', escribían en las redes algunos falsos inteligentes. Cuando eso no funcionó y mientras nosotros trabajábamos, empezaron a decir que no teníamos propuestas. Cuando en realidad estábamos tratando de armonizar las propuestas que teníamos. Y cuando nuestros candidatos dijeron que había mucha gente trabajando en él, inventaron el fantasma de la demora. Los blancos están demorados”, señaló.
En entrevista con No toquen nada, Da Silveira dijo que su postura crítica fue porque “de vez en cuando se deben recordar cómo son las cosas”. “Estábamos de acuerdo en hacerlo (con Lacalle Pou). Somos un equipo, todo se conversa. Esto no significa poner entre paréntesis la positiva, como dijo Jorge (Larrañaga): por la positiva no es no ver lo que pasa y callarse la boca, significa no entrar en el tiroteo diario, pero ayer que se cerraba ese proceso era bueno recordar que no había atraso y que en términos comparados con cómo funcionan las democracias en el mundo no había diferencia, que el programa era éste y no lo que aprobó la convención. Después de tantas semanas callados, valía la pena decirlo”, expresó.
Da Silveira, en su discurso, anticipó más críticas y dijo que los acusan de copiar cosas que dijeron primero.
“No vayan a creer que las críticas va na desaparecer, porque una particularidad de esta campaña es que todos hablan de nosotros. Si las propuestas son muy difíciles de atacar, van a decir que las copiamos, y si por alguna razón no les gustan, van a decir que están muy mal. Esto es lo que está pasando, nos están acusando regularmente de copiar cosas que dijimos antes que nadie”, expresó.
Además, el coordinador programático puso ejemplos de las críticas que le molestaron y le contestó al vicepresidente Danilo Astori.
“Si uno critica sin reconocer nada, entonces, se descalifica a sí mismo. Fíjense, hace algunos días, el vicepresidente de la República dijo que no conoce una sola buena idea económica que haya sido propuesta por la oposición. Fuerte, ¿no? Tres partidos de oposición están proponiendo cosas diferentes desde haces varios meses y Astori no encontró ni una idea buena. A pesar de que el déficit fiscal está por las nubes, que la inflación es la más alta en muchos años, a pesar de desastres como el de Pluna, a pesar de que la abundancia económica no trajo mejor educación e infraestructura. El futuro ministro de Economía no tiene nada que aprender de los demás. La pregunta es: ¿a quién deja mal ese comentario, a la oposición o a la cultura política que representa en esas palabras el contador Astori?”, expresó.
¿Por qué agenda?
Da Silveira explicó a No toquen nada por qué le llamaron agenda y no programa, que es el “concepto tradicional en política”.
“Nosotros preferimos usar el término agenda para marcar un par de cosas que nos importaban. La primera es que los programa están hechos como si no fuese a pasar nada nuevo, como si uno supiese de antemano todo lo que va a ocurrir en los cinco años de gobierno y no fueran a haber sorpresas que cambiaran el escenario. Y la verdad es que en la vida real hay muchas sorpresas. Un día los uruguayos nos despertamos y nos enteramos que el Mercosur estaba en vías de consolidarse y que en muy pocos días la política exterior del Uruguay tuvo que cambiar radicalmente para ajustarse a eso. Entonces, la agenda define grandes rumbos, objetivos, medidas que estamos seguros que vamos a querer hacer, sabiendo que debe existir un componente de flexibilidad para adaptarse a eso. En general, y en Uruguay se gobierna en coalición con otros, hay socios del gobierno que traen sus propias ideas y propuestas. Lo que nos importa es que los rumbos queden marcados, las prioridades, aceptando que después hay un margen de adaptación a los dos factores”, explicó.
