En uno de los videos que presenta el juego, FIFA explica que una de las principales novedades es "la enorme cantidad de emociones que los jugadores demuestran en el campo y los aficionados experimentan en las gradas". "El tono de un partido puede cambiar drásticamente mientras lo juegas", dice.
"Durante el juego, la característica de inteligencia emocional conecta a los 22 jugadores sobre el césped. Cada jugador tiene un sentimiento o actitud hacia los demás jugadores que evoluciona de forma positiva o negativa a medida que avanza y de todo lo que sucede en el partido", agrega.
Cuando un jugador recibe faltas continuas de un rival, este jugador puede confrontarlo. Y si un delantero está a punto de hacer un gol en los primeros minutos, sus compañeros lo animan, pero si sigue fallando, otros jugadores empezarán a mostrar frustración.
La web especializada en videojuegos, Meristation, señala que las respuestas del público ahora son más reales "y no tanto de cartón". "Dependiendo del campo, partido o afición, la intensidad de los gritos, ánimos o ambiente será diferente y se irá adaptando a cómo se va desarrollando el partido", agrega.
En el nuevo FIFA hay más precisión en el control del balón, que ahora se mueve y gira con mayor realismo.
Los arqueros tienen recciones más naturales y hacen gestos más realistas.