La nota emitida este lunes solicita a los países americanos “de manera consistente con sus políticas nacionales y su legalidad interna, considerar favorablemente” la política de recibir a los detenidos liberables de Guantánamo.
En los últimos días la fórmula del Partido Nacional manifestó su oposición a la llegada de detenidos desde Guantánamo a Uruguay como refugiados. Frente a esas declaraciones la embajadora estadounidense Julissa Reynoso respondió que el acuerdo es entre Estados y no entre partidos.
“¿Qué piensan sobre los presos de Guantánamo que el gobierno de su partido pactó con los Estados Unidos traer sin tratado ni marco jurídico habilitante?”, preguntó Jorge Larrañaga. “¿Qué piensa el doctor Tabaré Vázquez y el candidato a la vicepresidencia Sendic sobre esa suerte de pacto gringo que nadie conoce, que nadie sabe sus contenidos? ¿Cuál es el marco jurídico que lo habilita?”, añadió.
En tanto, Luis Lacalle Pou dijo que “el doctor Tabaré Vázquez debería responder a la pregunta de Jorge: ¿Qué vamos a hacer con el acuerdo de Mujica con Estados Unidos, no de Uruguay con Estados Unidos?”
La embajadora estadounidense dijo que “tenemos un acuerdo, una nota diplomática con el estado, no con un partido”. “Mi gobierno ha tenido una relación muy positiva con el partido del doctor Lacalle Pou históricamente y la idea es poder en el futuro continuar teniendo ese tipo de relación”, señaló.
“Nosotros vemos esto como un gesto sumamente humanitario, que hemos podido poco a poco hacer lo que el mundo nos pidió, buscarle la vuelta a este tema y poder cerrar un día la cárcel”, agregó Reynoso.
Según Insulza “más de la mitad de los prisioneros que aún quedan en Guantánamo están en condiciones de ser liberados, pero no lo han sido por falta de un país que los acoja”. “Se trata de personas que no han sido juzgadas, ni lo serán, por crimen alguno y las exhaustivas evaluaciones a que han sido sometidas por parte de las autoridades de Estados Unidos han determinado que no presentan riesgos graves para la seguridad de este país, ni de aquel que los acoja”, señala.
“El Gobierno de Estados Unidos ha solicitado a países del continente que examinen la posibilidad de recibir en su territorio a estas personas. Desde 2009, 18 países han acogido a un total de 48 detenidos, reduciendo la lista a 149. De ellos, 79 se encuentran en condiciones de ser liberados, si algún país los acoge. Una respuesta favorable para recibir a un número reducido de ellos, que no presenten riesgo para su seguridad, contribuiría a reducir sustantivamente este grave caso humanitario en territorio de las Américas”, dice la nota.
