Las disculpas de los encuestadores en un 2014 "muy complicado"

Tanto Luis Eduardo González, director de Cifra, como su colega de Equipos Mori, Ignacio Zuasnábar, pidieron disculpas por la lejanía que hubo entre sus proyecciones y los resultados finales de las elecciones de este domingo. González dijo que fue “la derrota profesional más dura” de su carrera y ambos reconocieron que se debe revisar la metodología con que se analizan los datos. Desde Factum, Oscar Bottinelli reclamó que se regule la actividad y se financie desde el Estado.

Actualizado: 30 de octubre de 2014 —  Por: Redacción 180

Las disculpas de los encuestadores en un 2014 "muy complicado"

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Todas las encuestas difundidas antes de las elecciones coincidieron en subestimar la votación que finalmente obtuvo el Frente Amplio. En cambio, sobrestimaron el caudal electoral que tendría el Partido Colorado. Eso configuraba un escenario sin mayorías parlamentarias y con muchas más chances de que Luis Lacalle Pou fuera electo en el balotaje.

Finalmente, el Frente Amplio votó en 48% (cuatro o cinco puntos en promedio por encima de lo que indicaban las encuestas) y el Partido Colorado quedó en el 12% (hasta seis puntos por debajo de las proyecciones). Además, está casi confirmado que habrá mayorías parlamentarias para la coalición de izquierda y Tabaré Vázquez es amplio favorito para el balotaje del 30 de noviembre.

González reconoció este miércoles en Canal 12 que las estimaciones “estuvieron demasiado lejos” de lo que finalmente sucedió. “Me siento obligado a pedir disculpas a los espectadores, al canal y al equipo periodístico”, dijo.

El director de Cifra fue muy contundente en el pedido de disculpas y dijo que sus proyecciones estuvieron “muy mal”. “Esta ha sido la derrota profesional más dura de mi carrera y el haber pasado muchos años sin conocer un fracaso de este calibre me la hace más pesada”, afirmó.

Zuasnábar recordó el lunes en Canal 10 que en las internas también hubo errores en las encuestas al pronosticar el resultado en el Partido Nacional. “El año 2014 viene siendo un año complicado para las encuestadoras”, afirmó. “Esto nos lleva a hacer una reflexión profunda de nuestros métodos, revisar nuestro trabajo”, agregó.

En el mismo sentido se pronunció González. Se debe “tratar de aprender del fracaso y tratar de mejorar nuestra capacidad para las instancias que vienen. En eso estamos”, afirmó.

El director de Equipos señaló algunos cosas que pueden estar incidiendo en estos errores. “Algunas correcciones probablemente sean de largo plazo. Estamos en un momento muy especial de las encuestas porque hay metodologías de relevamiento muy heterogéneas: cara a cara, telefonía fija, celular, facebook. Así está el mundo, no es solo en Uruguay. A su vez hay cambios en el electorado. Parece estar pasando en Uruguay donde hay pequeños núcleos de la población que se definen a último momento”, opinó.

González atribuyó los errores a la interpretación que se hace de los datos duros que llegan de las encuestas.

“Los factores que se usan para ponderar y corregir los números crudos de las encuestas no anduvieron bien. Las encuestas crudas en políticas en este país dan cosas muy alejadas de la realidad. La gente tiene tendencias muy diferentes, muy asociadas a sus opciones político-partidarias, a aceptar la entrevista o ser realmente franco. Entonces hay que trabajar la información cruda. La forma de trabajar esa información es un poco artesanal. Aplica ideas y teorías generales pero el diseño en sí es un poco artesanal y se ve si es bueno después de las elecciones”, afirmó.

En tal sentido, explicó que “el país está cambiando más rápido que nuestra velocidad para entender esas cosas”.

“Si uno mira los resultados más generales sigue siendo el país de las dos mitades. El Frente, si uno redondea, fue el 48% en 2009 y el 48% ahora. Vamos a la mayorías parlamentarias, las tenemos en Diputados y falta un pelito en el Senado. Entonces, ¿estamos igual? No. El país está cambiando. Se está volviendo más homogéneo políticamente, hay menos diferencias entre las regiones y departamentos. De los 19 departamentos del país el Frente solamente votó menos en Montevideo, Maldonado y un poquito en Canelones. En los otros 16 departamentos votó mejor. Donde perdió votos fue en los departamentos más ricos y más modernos socialmente. Eso significa que hay muchas diferencias. Eso tal vez sea bueno para el país pero malo para las encuestadoras y para Cifra en particular”, ironizó.

González también fue contundente al cambiar un pronóstico que había hecho el domingo al cierre de la transmisión especial de las elecciones en Canal 12. Allí, basado en el 46.5% que daba su proyección de escrutinio dijo que no había favoritos para el balotaje.

Luego de confirmarse el 48% para el Frente Amplio, González dijo que Tabaré Vázquez “es amplísimo favorito para el 30 de noviembre. Para Lacalle Pou no es imposible pero empieza muy cuesta arriba”.

Pedido de regulación

El director de Factum, Oscar Bottinelli, se manifestó a favor de regular las encuestas. Su empresa fue una de la que estuvo más cerca de acertar el resultado final de las elecciones.

“Hace 20 años Factum viene proponiendo la necesidad de regular las encuestas. Hay que regularlas para asegurar seriedad, rigor y transparencia de parte de la realización de las encuestas, de la difusión, de cómo son manejadas públicamente por los medios de comunicación y por los actores políticos y cómo se analizan”, afirmó.

Bottinelli destacó que “en la noche de la elección, estas proyecciones que se dice que deberían ser más precisas, se hacen todas a costa de privados, pagos esencialmente por cada uno de los canales privados a su propio costo”.

Además fue más allá al pedir que el Estado debería financiar estas actividades porque “un tercio de lo que pagan en los canales termina por distintas retribuciones, yendo a las arcas del Estado”.

“En todo el resto del mundo no solo el Estado no percibe nada por eso sino que el gasto es totalmente del Estado. Este también es un tema que hay que analizar en el marco de regulaciones de un servicio público esencial por el cual se conoce el resultado de las elecciones y la misma noche hubo festejos, acuerdos, apoyos y definiciones. Esto se hace en base a una actividad privada en la que el Estado no solo no contribuye sino que a veces hasta castiga económicamente”, afirmó.