Dilma pone a "manos de tijera" al frente de la economía

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, designó el jueves al economista ortodoxo Joaquim Levy, de 53 años, como ministro de Hacienda para su segundo gobierno, mientras que Nelson Barbosa ocupará el Ministerio de Planificación. En la primera conferencia de prensa, anunció superávit fiscal desde 2015.

Actualizado: 28 de noviembre de 2014 —  Por: Redacción 180

Dilma pone a "manos de tijera" al frente de la economía

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En tanto Alexandre Tombini se mantiene como presidente del Banco Central, según una nota de prensa difundida por el Palacio de Planalto, sede de la presidencia brasileña.

Levy es un ingeniero naval, con un doctorado en Economía por la Universidad de Chicago, sede del neoliberalismo, que fue funcionario del Fondo Monetario Internacional y hasta ahora se desempañaba como director de administración de fondos de inversión de Bradesco, el segundo banco privado de Brasil.

Según Folha de Sao Paulo, va a cambiar un sueldo que podía llegar a los tres millones de reales por año por 27.000 reales mensuales.

Los analistas de la prensa brasileña ven en esta elección de Dilma Rousseff un reconocimiento de que la economía de su país enfrenta fragilidades y un posible recorte de gastos y aumentos de impuestos. Tanto que Levy ya es llamado de "Joaquim manos de tijera" en la sede de la Presidencia de Brasil, según informa Folha.

Los titulares salientes de Hacienda, Guido Mantega, y de Planificación, Miriam Belchior, permanecerán en sus cargos "hasta que se concluya la transición y la formación de nuevos equipos de sus sucesores".

Según la prensa local, los nuevos ministros trabajarán desde esta semana desde el Palacio de Planalto, en una oficina contigua a la de Rousseff.

Tombini, Levy y Barbosa en su primera conferencia de prensa (AFP)

Levy "es un excelente nombre. Considerado austero, riguroso. Esto nos puede dar una señal de que se vienen ajustes fiscales", dijo a la AFP el economista de TAG Investimentos, André Leite.

El diario Folha de Sao Paulo lo describió como "adicto al trabajo, franco en el límite de lo maleducado" y "tan terco como Dilma".

La presidenta enfrenta un segundo mandato complicado tras cuatro años de magro crecimiento y una inflación elevada, de 6,59% en 12 meses, por encima del techo de la meta oficial.

El PIB de la séptima economía mundial, que en 2010 se disparó un 7,5%, crecerá apenas por encima de cero este año y la industria está en retroceso, aunque el desempleo se mantiene bajo (4,7% en octubre).

Primeros anuncios

El nuevo equipo económico de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, prometió el jueves un segundo gobierno con mayor ahorro público y un drástico control de la inflación para reactivar el débil crecimiento.

"Vamos a trabajar con una meta de superávit fiscal primario (ahorro para el pago de la deuda pública) de 1,2% del PIB para el 2015, en tanto que para el 2016 y 2017 esta no será menor a 2%", dijo el futuro ministro de Hacienda, Joaquim Levy, en la conferencia de prensa de presentación del nuevo equipo económico.

Levy, un economista de 53 años cercano al mercado, fue designado el jueves por la presidenta Dilma Rousseff en reemplazo de Guido Mantega, que ocupaba el cargo desde 2006.

"Esta meta es fundamental para reactivar el crecimiento", agregó. El cumplimiento de este objetivo de ahorro es seguido atentamente por el mercado y por organismos multilaterales, y es tomado como una señal de confianza en la economía.

La meta, que era de 3,1% del PIB, disminuyó para 1,9% en 2013 y se esperaba el mismo guarismo para el 2014. Sin embargo, hasta septiembre de este año, el gobierno sólo ha conseguido ahorrar el equivalente al 0,61% del PIB.

El Congreso debate ahora un proyecto de ley para poder reducir la meta de este año, fijada en el presupuesto, y descontar de ese ahorro la totalidad de lo que el gobierno gasta en su Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC) así como exoneraciones tributarias.

En el Ministerio de Planificación el gobierno designó a Nelson Barbosa, mientras que Alexandre Tombini se mantiene como presidente del Banco Central.