El país más poblado del mundo ha demostrado su capacidad para producir talentos y ganar medallas en deportes como la gimnasia, los clavados, el tenis de mesa y el bádminton.
Pero pese al fichaje estos últimos años de entrenadores y jugadores pagados a precio de oro, el fútbol chino no despega y la selección solo figura en la 99ª plaza de la clasificación de la FIFA.
En una reciente reunión del Consejo de Estado (gobierno), se tomó la decisión de transferir la responsabilidad de la promoción del fútbol en la juventud china al ministerio de la Educación Nacional, y de retirársela a la Asociación Nacional de Fútbol, fragilizada por múltiples escándalos de corrupción, informó este viernes el diario oficial China Daily.
El viceprimer ministro Liu Yandong declaró en esta ocasión que el desarrollo del fútbol es la base requerida por China si quiere lograr su objetivo de figurar al lado de la élite mundial en los grandes eventos deportivos, señaló el diario.
"El fútbol nunca fue objeto de una promoción seria en las escuelas chinas, debido al predominio de los estudios", declaró el vicedecano de la Universidad Deportiva de Pekín, Wu Wenqiang, citado por el diario.
"El fútbol chino habría ya alcanzado un nivel mundial si este juego hubiera sido promocionado antes en las escuelas", declaró por su parte Liu Hechun, un monitor de educación física de escuela primaria de la ciudad de Dalian (noroeste), reconocida en China por sus futbolistas de talento, también citada por el diario.
Vecinos de China como Japón o Corea del Sur tienen mejor nivel.
El equipo surcoreano llegó a semifinales en el Mundial de 2002, cuando China perdió sus tres partidos de la primera fase.
AFP
