Luego de largas conversaciones, de idas y vueltas, de amenazas de que se caía el pase, el Benfica y Peñarol acordaron el traspaso de Jonathan Rodríguez al fútbol portugués.
Más que negociar, el Benfica impuso las condiciones y Peñarol cedió para poder concretar la transferencia.
Según dijo a 180 un directivo aurinegro, el club cede a préstamo a Rodríguez a cambio de que los portugueses paguen dos millones de euros por el 40% de la ficha del jugador. “Ese dinero se paga contado, en el mismo momento en el que nosotros enviemos el TMS (certificado que habilita la transferencia del jugador)”, contó.
En junio de 2017 el Benfica tiene la opción de adquirir el 60% restante por un monto de cuatro millones de euros.
“Si en estos dos años y medio hay algún problema, como el de la cadera que es el que más los preocupa, el negocio se cae. Pero si quieren hacer uso de la opción lo hacen sin problema”, agregó el dirigente.
El final de la historia resultó tan intenso como el desarrollo. El pase se entreveró, según se dijo, por las declaraciones del periodista deportivo Jorge Da Silveira sobre el futbolista y esto llevó al Benfica a renegociar.
Desde Portugal, el directivo aurinegro Ricardo Rachetti trasladó al Consejo Directivo la nueva propuesta del Benfica. Peñarol la rechazó y realizó una contrapropuesta, pero el Benfica siquiera la consideró. Ante la certeza de que el pase se caía Peñarol aceptó lo que había.