Fiesta K en el último 25 de Mayo con Cristina como presidenta

La presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner pidió este lunes apoyar a los candidatos oficialistas en las presidenciales del 25 de octubre y auguró un triunfo de su partido, al cerrar los festejos por la fecha patria ante una multitud en la Plaza de Mayo de Buenos Aires.

Actualizado: 26 de mayo de 2015 —  Por: Redacción 180

"No se trata de irse o de quedarse, este es un proyecto colectivo, no depende de una sola persona, depende de ustedes para que pueda ser ejecutado y llevado adelante", dijo la presidenta que concluye en diciembre su segundo mandato consecutivo sin posibilidad constitucional de reelección.

La mandataria advirtió sobre eventuales hechos de violencia que puedan perturbar la campaña electoral que tendrá elecciones internas abiertas y obligatorias el 9 de agosto para definir candidatos a la presidencia.

"Estemos atentos todos de lo que pasa porque tal vez intenten hacer cosas para enojar a la gente, para que la gente se asuste y se enoje con alguien", dijo.

En un discurso transmitido por cadena nacional, la mandataria pidió a los medios de comunicación "no exacerbar los ánimos de enfrentamiento de los argentinos que necesitan escuchar a los hombres y mujeres que van a conducirlos a partir del 10 de diciembre".

En un escenario montado en la histórico paseo público y frente a una multitud que desbordó la plaza desde horas antes, Cristina se abstuvo sin embargo de mencionar a los dos precandidatos presidenciales oficialistas, el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo y el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, ambos junto a ella entre decenas de dirigentes.

En un discurso de fuerte tono electoral, la presidenta recorrió las medidas de su gobierno y de su esposo y antecesor, el expresidente Néstor Kirchner (2003-2007), fallecido en 2010 por una crisis cardíaca.

"Esto no es ambición de poder. Quieren hacerle creer a la gente que es bueno que cada cuatro años cambie todo. Si cada cuatro años cambia todo, no cambia nada. Este proyecto de transformación de 12 años debe ser profundizado y debe continuar", dijo al considerar que "sin ninguna duda seguirá ese rumbo".

 

 

Revolución de Mayo

El discurso, seguido de un festival musical, cerró una semana de celebraciones por el aniversario de la Revolución de Mayo de 1810 que condujo a la independencia de la corona española. Sin embargo, Cristina no se refirió a 1810 sino a 2003, cuando un 25 de mayo asumió Néstor Kirchner como presidente, tras obtener el 22% de los votos en primera vuelta y con un Carlos Menem que no quiso disputar el balotaje. 

Los actos incluyeron espectáculos, muestras y la inauguración de un monumental centro cultural y sala de conciertos en el remodelado Palacio de Correos del siglo XIX de la capital argentina. Se llama Centro Cultura Kirchner y la presidenta le respondió a los críticos por el nombre. "Que hagan uno más grande y le pongan el nombre que quieran", diijo.

Cristina participó este lunes por la mañana del tradicional Tedéum que se celebró en esta ocasión en la centenaria Basílica de Luján, 75 kilómetros al oeste de Buenos Aires.

En la misa también estuvieron presentes Randazzo y Scioli al igual que todo el gabinete ministerial de Kirchner.

En su homilía ante Kirchner y los dos precandidatos oficialistas, el arzobispo de Luján, Agustín Radrizzani, arengó por "cultivar la convivencia en todos los argentinos, la solidaridad, mayor justicia social y participación en los proyectos comunes". 

"No se hagan daño, cuídense, que no haya odio, que no haya peleas, dejen de lado la envidia, dialoguen", pidió el prelado.

La semana pasada Randazzo y Scioli se vieron envueltos en un entredicho luego de una polémica broma de Randazzo en un acto público al referirse a la condición física del gobernador, que sufrió la amputación del antebrazo derecho en un accidente náutico en 1989.