Recién había terminado el Uruguayo que Nacional ganó con Munúa como capitán del equipo y Ache ya tenía pensado el perfil de entrenador para suplir a Álvaro Gutiérrez, que más allá de formalismos había decidido aceptar la oferta de Arabia.
Quería un técnico con “perfil europeo” y pensó en Gustavo Poyet y Diego López. Ninguno de los dos aceptó la propuesta. Entonces, pensó en alguien de la casa.
El presidente habló con algunos compañeros de lista y también informó a José Fuentes, dirigente de la oposición. “Quiero que Munúa sea el técnico de Nacional”, les dijo Ache. Argumentó que era una persona con el perfil que estaba buscando.
Varios directivos lo apoyaron y otros, entre ellos Fuentes, le contestaron que no estaban de acuerdo. Respondieron que era demasiado arriesgado y que la “aventura podía terminar mal”. “No es el momento de Gustavo”, agregó Fuentes.
El presidente, se basó en la opinión del gerente deportivo, Alejandro Lembo, y en el instinto. Fue así que se reunió con el arquero, a quien le quedaban seis meses más de contrato, para ofrecerle la dirección técnica. Munúa había hecho el curso de entrenador en España, al mismo tiempo que jugaba en la Liga.
Según supo 180, tras la propuesta de Ache, Munúa se entusiasmó con pasar del arco al banco y con el paso de las horas decidió aceptar.
Hace una semana, el ahora entrenador se comunicó con el profesor Jorge Franco, su preparador físico en la sub 20 de Malasia, para ofrecerle el cargo. Lo mismo hizo por teléfono con Christian Berman, quien trabajó como ayudante de campo en el Southampton y fue su compañero en juveniles de Nacional.
"En la vida hay que tomar decisiones", dijo Munúa en su presentación como nuevo entrenador. "Cerré una etapa como jugador en un momento muy lindo. El club me propuso este desafío y tuve que pensar y analizar cosas muy rápido", explicó. Y si bien reconoción que hay "riesgos" dijo estar "muy convencido de este desafío".
"Al principio lo analicé pero hoy no tengo ninguna duda. La decisión que más me sedujo fue la de entrenar a Nacional. Fue en poco tiempo pero es algo que yo ya venía viendo. Preocupándome por las cosas del entrenador y viendo otras cosas", agregó.
Antes de la última fecha del Clausura, 180 entrevistó a Munúa: “Disfruto del fútbol y tengo claro que el día que no me sienta bien no me van a tener que decir nada. Porque sé que hay un comienzo y hay un fin. Puede ser dentro de bastante tiempo o puede ser dentro de muy poco. No lo sé”, dijo en ese momento. Pocos días después se respondió a sí mismo.
