Y digo todos porque, además de la comunidad de historiadores, que tiene especial interés en compartir sus investigaciones y someterlos a los comentarios y críticas de sus colegas, todos aquellos que entendemos la Historia como una disciplina que ayuda a pensar el presente problematizando el pasado tendremos la oportunidad de asistir a una variada gama de áreas temáticas. Pienso que tanto para cientistas sociales, docentes, estudiantes, periodistas, como para personas con militancia social, las Jornadas significan una oportunidad de acercarse a un campo por demás prolífico y efervescente como lo es el de la historiografía. En muchos aspectos, la renovación de temas, de generaciones y los clásicos han permitido una diversidad riquísima en temas, líneas de investigación novedosas y revisiones de tópicos tradicionales.
Las nuevas corrientes historiográficas (coordinada por José Rilla) y la historia conceptual (una nueva senda del trabajo a nivel mundial, coordinada por Gerardo Caetano) acercan la frontera del conocimiento sobre la práctica de la historia a nuestro país. Áreas como las anteriores -de alta densidad teórica- coexisten junto a otras vinculadas a las nuevas agendas: medios de comunicación e historia (coordinada por Mirta Varela, Mónica Maronna e Inés de Torres), Género y Sexualidad (coordinada por Diego Sempol) y representaciones estéticas y dictaduras (coordinada por Francisco Bustamante y Malvina Guaraglia). A su vez se pueden observar mesas de neto corte interdisciplinario en donde la cercanía entre historia y ciencia política resulta harto fecunda: Estado y políticas públicas (coordinado por Silvana Harriet), Instituciones políticas (coordinada por Jaime Yaffé y Pablo Ferreira) e Izquierdas y derechas (coordinada por Magdalena Broquetas y Marina Cardozo).
Todo lo anterior no es más que un simple resumen de los titulares principales. Pero si me preguntaran ¿qué tienen de bueno estas jornadas? Diría que, partiendo de esta enorme base conceptual y de investigación, las jornadas tiene una historia de casi una década, en donde se juntan más de 200 investigadores de toda la región, con variedad de metodologías y encares culturales y que, sus presentaciones lejos están del tecnicismo y la jerga para entendidos, ya que las propuestas apuntan a compartir trabajos que interpelan el pasado desde el presente y en clave regional, lo que significa un valiosísimo aporte para las reducidas dimensiones de nuestra escala cotidiana.
La oportunidad de escuchar e intercambiar con especialistas en diversos terrenos, desde las derechas europeas con la presencia de Ismael Saz (Univ. De Valencia) o sobre la historia, los medios y la realidad argentina con Mirta Varela (Univ. De Buenos Aires) son solo las puntas de los muchos icebergs que las jornadas ofrecen para todos los que quieran acercarse a vivir un poco más históricamente nuestra realidad, en diálogo con lo que se estudia y se investiga en la región y el mundo.
Las Jornadas de Historia Política se desarrollarán desde miércoles 8 al viernes 10 de julio, en el Instituto de Ciencia Política de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República (Constituyente 1502).
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