Europa dividida ante 300.000 migrantes

Los países europeos, exhortados por Bruselas a respetar sus "valores de humanidad", mostraban el lunes sus divisiones acerca de la gestión de la crisis planteada por la llegada al continente de miles de inmigrantes y refugiado.

Actualizado: 31 de agosto de 2015 —  Por: Redacción 180

Se trata de una "crisis mundial" que "requiere una respuesta conjunta europea", indicó el lunes el vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Timmermans. "Se trata ante todo de ser fieles a nuestros valores, valores de humanidad", dijo.

Agregó empero que las cifras de inmigrantes "son administrables para un conjunto de 500 millones de habitantes".

El comisario hizo el anuncio en una conferencia de prensa junto con el primer ministro francés Manuel Valls, con quien visitaba Calais, ciudad del norte de Francia, en la que se encuentran bloqueados miles de inmigrantes que desean instalarse en el Reino Unido.

"No expulsaremos nunca a quienes necesitan protección", recalcó Timmersmans, quien anunció la UE dará a Francia una ayuda suplementaria de 5 millones de euros para hacer frente a la situación de los inmigrantes en Calais.

Por su parte, Manuel Valls subrayó el "reto planteado" a "cada uno de los países de la Unión Europea", que "pone a prueba" a sus sociedades.

En este lugar emblemático de la situación de los inmigrantes, Valls y Timmersmans se reunieron con algunos de ellos, en compañía del comisario europeo a cargo de cuestiones migratorias, Dimitris Avramopoulos.

Europa es escenario del mayor movimiento migratorio registrado en el continente desde la Segunda Guerra Mundial. Unas 300.000 personas llegaron a territorio europeo este año, en su mayoría procedentes de países en guerra, como Siria.

Esta situación ha provocado tensiones en las relaciones entre los países europeos.

La ministra austriaca del Interior, Johanna Mikl-Leitner, abogó el lunes en favor de una "reducción", o hasta de una "supresión", de las ayudas dadas por Bruselas a los países de la UE que rehúsan recibir más refugiados.

"Demasiados países se niegan a asumir su parte", lamentó asimismo Manuel Valls. "Toda Europa es concernida por esta crisis de gravedad excepcional, y debe por tanto movilizarse", dijo el primer ministro francés.

El domingo la cuestión provocó una minicrisis diplomática entre París y Budapest.

Citando a Hungría, el canciller francés, Laurent Fabius, consideró el domingo "escandalosa" la actitud de ciertos países del este de Europa e instó al desmantelamiento de la barrera erigida por las autoridades de Budapest en la frontera con Serbia.

Su homólogo húngaro, Peter Szijjarto, consideró "chocante" la crítica y convocó el lunes al embajador de Francia Francia en Budapest.

El tema es también objeto de debates internos en diversos países europeos. 

Países acusados

Alemania, que recibirá 800.000 solicitantes de asilo en 2015, es decir cuatro veces más que en 2014 y más que cualquier otro país de la UE, reclama un mejor reparto de los refugiados entre los países europeos. que se muestran divididos sobre la cuestión.

La Comisión Europea desea también repartir a los solicitantes de asilo entre los países miembros para aliviar a los países de llegada. Ese reparto, sobre una base voluntaria, es frenado por la negativa de varios países, entre ellos Austria, Hungría, Eslovaquia y Eslovenia.

Además de ellos, el diario popular alemán Bild acusa el lunes a Francia, Gran Bretaña, Italia y Lituania, que según el periódico no acogen a tantos refugiados como podrían.

El tema es también objeto de debates internos en diversos países europeos.

El lunes, el diario polaco Gazeta Wyborcza criticó asimismo la actitud de la sociedad polaca al respecto. "El egoísmo xenófobo de los polacos aparece claramente. ¿Por qué los políticos polacos no tienen la valentía de oponerse a él?", plantea el periódico.

En Francia, declaraciones hechas el fin de semana por Valls en favor de los refugiados le valieron críticas de la oposición de derecha y de extrema derecha.

La cuestión de los migrantes será objeto de una reunión ministerial de la UE el 14 de septiembre.

Entre tanto, en la "ruta de los Balcanes", miles de personas, principalmente procedentes de Siria, Irak y Afganistán, siguen tratando de llegar al espacio  Schengen a pie, en autobuses o en trenes.

(AFP)