Montevideo Comics es la principal convención nacional de cómics, animación y videojuegos. Comenzó realizándose en el 2002 en el local de Pachamama, en Plaza Independencia, y recibía a unas 600 personas.
Este recinto les quedó chico rápidamente y pasaron al Cine Plaza, que también debieron abandonar por el actual Auditorio Nacional del Sodre. Este cambio no sólo marca la legitimidad que ha ido ganando el evento, sino también la magnitud que alcanzó con los años, recibiendo entre 7.000 y 8.000 personas en 2015.
“No cabe duda que hacerlo en el Auditorio fue una suerte de consagración para el evento por varias razones, como la edilicia, porque es un lugar gigantesco. Durante años, Montevideo Comics iba creciendo más rápido que su estructura y ahora se siente que sigue haciéndolo pero el lugar está preparado para resistirlo. Además, al hacerse por 14 años seguidos hace que hasta el más desconfiado ya se debiera haber acostumbrado”, dijo a 180 Rodolfo Santullo, guionista y editor de historietas al frente de Grupo Belerofonte, una de las principales editoriales de cómics del país.
Freaks, nerds, todos
Matías Bergara, dibujante uruguayo que trabaja para editoriales de Estados Unidos y Europa, dijo a 180 que eventos como Montevideo Comics “no pretenden limitar al público” sino todo lo contrario, “son integradores, buscan que asista la mayor cantidad de gente posible y se dé el encuentro de una cantidad de personas distintas”.
“Ante lo legitimado de la convención tras los años y el desarrollo institucional que ha tenido, es difícil encasillarlo como de culto o dedicado a una minoría, porque no lo es. La cantidad masiva de gente que va demuestra que es cualquier cosa menos un evento de características ‘under’ o contracultural. Ese perfil creo que duró solamente en la primera o segunda edición y luego pasó a ser masivo, como suelen ser las convenciones”, añadió Bergara, que dibujó en la serie de cómics de Sons of Anarchy, en la novela gráfica American Vampire de DC Comics y actualmente trabaja en una miniserie que será lanzada por la editorial estadounidense Image Comics, entre otros proyectos.
Para Bergara, Montevideo Comics “quiere transmitir la imagen de este sector no como algo de un nicho aislado sino lo contrario, como algo bastante integrador”.
Desde el slogan de esta 14ta edición se juega con la idea de que todos somos “raros” si nos observamos mutuamente, al escribir en los posters del evento que “Más freaks son los periodistas deportivos/escribanos”.
Bergara se refirió al mote de “freak” que suele asignársele a los fanáticos de estas disciplinas, y dijo que es un término que quizás ayuda a englobar a tipos de gente muy diversos que participan de este evento, tanto a los que van por los videojuegos, o por el cosplay, o el cine, el coleccionismo o los cómics.
“Evidentemente, es gente muy distinta pero que en este evento se encuentran hermanados o atraídos por lo mismo. Si hay que ponerle un nombre a la tendencia que los une a pesar de ser tan diferentes, quizás ahí entre el concepto del ‘freak’: el tipo que se dedica a algo distinto, tiene intereses raros o atípicos, los cuales persigue como una pasión”, añadió el dibujante.
Además, opinó que no cree que ese término haya sido promovido por la convención sino por los propios adolescentes que siguen esa tendencia, y que la palabra ha tenido una resignificación respecto de su uso original, que era más peyorativo. “El evento desvía ese mismo concepto hacia otras direcciones, por eso dice que ‘freaks’, en cierto modo, somos todos”, añadió Bergara.
Por su parte, Santullo remarcó la importancia de que hoy en día, los grandes blockbusters del cine son basados en historietas de superhéroes, incluso en aquellos personajes que no eran tan mainstream en sus versiones impresas. Dijo que esto “va haciendo que el público no sea prejuicioso” porque la convención “no es un espacio privativo para el fan, el freak o el nerd; para nada, la historieta es un lenguaje como cualquier otro y si te gusta leer o el cine, alguna historieta te va a gustar”.
Además, contó que cuando comenzó a hacer historietas a finales de los 90, “si decías que te dedicabas a eso, te decían ‘¡qué nerd!’”; mientras que ahora puede que le digan “¡qué tipo cool!”. “Y no, sos el mismo perejil de siempre, no eras ni tan nerd antes ni tan cool ahora”, comentó, entre risas.
Impacto del evento en la cultura y la producción
Ambos coincidieron en la importancia que ha tenido Montevideo Comics a lo largo de estos 14 años como impulsor de las disciplinas que engloba y de sus artistas.
El dibujante Matías Bergara dijo que “especialmente, en los últimos cinco años, se ve que la industria creció más, la producción nacional e internacional”, y que el aumento en el público año a año se ve beneficiado por la relevancia de los invitados que llegan a la convención.
Santullo se refirió a que si bien “a lo largo de los años ha crecido para bien” en todas las ramas, remarcó la importancia que ha tenido para el mundo uruguayo de la historieta.
Señaló que como la producción nacional se coordina para tener obras nuevas en la fecha del evento, “es un momento muy especial porque es cuando enfrentás al público de forma directa”.
Para el editor de Grupo Belerofonte, en los últimos años el público uruguayo del cómic se ha diversificado gracias a eventos como este y a otros como “Ideas+” o la Feria del Libro. Dijo que han logrado que libros de historietas como “Zitarrosa” fueron recibidos “con mucho entusiasmo” por el público general que no es habitual comprador de estas publicaciones.
Respecto a las ventas de los cómics en Uruguay, Santullo dijo que como sucede con cualquier otra publicación artística, el éxito depende del título. De todas formas, indicó que “más o menos, venden lo mismo que un libro de autor nacional, entre 300 y 400 ejemplares” y que hay casos en los que venden más y deben reeditarse.
Los futuros historietistas
Bergara señaló que las generaciones “cuánto más jóvenes son, con mayor facilidad se mueven en el sector cultural hacia cosas vinculadas a lo audiovisual”. Además, destacó que la existencia de eventos como esta convención hace que tengan la oportunidad de comunicarse con referentes del país y del exterior, algo que antes, sin internet, los actuales dibujantes no podían hacer.
Para Santullo, es importante para los jóvenes interactuar con dibujantes y escritores como él y sus colegas para demostrarles que se puede llegar a vivir de ello. Citó el caso del argentino Horacio Lalia, que estará en Montevideo Comics presentando la primera edición completa en castellano de “Helltrekkers”, un libro de ciencia ficción publicado en Inglaterra en los 80. Lalia tiene 75 años y trabaja hace más de 50 en el mundo del cómic, y Santullo lo definió como “una de las personas más accesibles que hay en la industria”.
“Es imprescindible poder hablar con un tipo así que no tiene reparo en contar detalles y aconsejar. No lo podés dejar pasar”, añadió.
Bergara asistió como niño a los talleres de Tunda y Ombú pero el resto de su formación fue autodidacta. A pesar de que trabaja para diversas editoriales del mundo, reconoce la importancia que tiene en el trabajo creativo el tener un tiempo semanal dedicado a la creación libre. El utiliza su sitio en Tumblr para compartir muchas de éstas.
“Es bueno para el fortalecimiento de lo creativo y también para el producto. Muchas cosas que hago porque tengo ganas luego tienen un potencial comercial o de avanzar mi carrera y llevarme a lugares que no tenía esperado, donde poder probar nuevas disciplinas”, comentó.
El dibujante estará presentando un taller sobre sus experiencias trabajando para la industria del exterior en lo relativo al desarrollo profesional, el trato con los clientes, los cambios que se dan en el mercado y la preparación necesaria que debe tener cada aspirante si pretende tener una oportunidad en la industria del cómic. Esta charla será el sábado a las 20:45 en el Auditorio.
