Así lo dijo la presidenta del ente Marta Jara en la presentación de los estados financieros de 2016.
“Manifestamos nuestro compromiso con la sociedad de seguir profundizando estas eficiencias para poder trasladarlas a la tarifa, una vez que se consolide definitivamente la gestión”, dijo.
2016 mostró como resultado una ganancia de 15 millones de dólares incluyendo los resultados financieros y efectos contables, después de cinco ejercicios con números negativos (de 2011 a 2015).
La situación se explica en gran medida por la capitalización que el Ministerio de Economía le brindó a Ancap y porque el año pasado tuvo ingresos similares a los de 2015 pero con menores costos.
“Resaltamos la solidez financiera que estamos alcanzando, sobretodo que se consolida una tendencia. Los ingresos han sido constantes, con costos menores y eso genera la posibilidad de sanear la empresa en términos financieros”, destacó Jara.
Los ingresos netos cayeron 2,6% pero los costos de ventas bajaron más de 16% y eso explica buena parte del resultado.
Para 2017 se plantea como meta tener ganancias por más de 100 millones de dólares. Ancap destacó en su informe la reducción de la deuda, la baja en las tasas de endeudamiento y la suba en la calificación crediticia, mejoran el crédito para todo el grupo.
Según Ancap, la “refinación de combustibles es un negocio robusto que agrega valor frente a la alternativa de importación”. Así lo explicó el gerente general Ignacio Horvath.
“El costo total es de 53,8 dólares por barril de productos procesados. Si hubiéramos importado esta misma cantidad de producto nos hubiese costado 58,85. Se muestra que la actividad de refinación es positiva, aportando 5,04 dólares por barril de crudo procesado. Estamos realizando proyecciones en las que estimamos que la actividad de refinación va a ser nuevamente positiva para Ancap y estamos dando un rango de entre 3 y 6 dólares por barril de crudo procesado, dependiendo de las variables macroeconómicas y la situación del paro de la refinería”, afirmó.
En cuanto al portland se apuesta a mantener las tres plantas en funcionamiento, con fuertes medidas de racionalización de costos e inversiones que permitan mejoras en la productividad con el objetivo de alcanzar un EBITDA positivo en mediano un plazo de dos años.
