"Estamos definidos por nuestro compromiso hacia los valores comunes, el imperio de la ley, la democracia, la libertad, el respeto mutuo, la igualdad para hombres y mujeres", dijo a los periodistas el primer ministro, Malcolm Turnbull.
"Estos valores fundamentales son lo que nos hace australianos. Nuestros proceso de ciudadanía debería reflejar eso", afirmó. "Por lo tanto hoy vamos a anunciar cambios para fortalecer la ciudadanía, para hacer más fuerte a Australia, más fuerte la ciudadanía y más fuertes los ciudadanos".
Este anuncio se produce en un momento en que aumenta la presión de populistas y el partido de extrema derecha Una Nación, de Pauline Hanson, ha experimentado un resurgimiento.
Según las nuevas reglas, los candidatos a la ciudadanía deberán ser residentes permanentes en el país durante cuatro años, mientras que ahora era necesario un año.
También deberán presentar su historial laboral y mostrar cómo están integrados en la comunidad local.
La nueva normativa endurecerá las pruebas "cívicas" y los candidatos deberán responder a cuestiones sobre la violencia doméstica, indicó el ministro de Inmigración, Peter Dutton.
Esta reforma será enviada al parlamento en un plazo breve.
AFP