La resolución de la jueza María Helena Mainard le permitirá a la AUF recibir casi tres millones de dólares que se componen de 1.000.000 de dólares que pagó la empresa Pitch International y 1.750.000 dólares que pagó la empresa Caracol Televisión como cumplimiento del contrato por los derechos televisivos de la selección.
Además, la decisión deja el camino allanado para que se pueda cumplir con el resto del contrato.
Los jugadores de la selección ya tienen convenido con la AUF que ese dinero irá para los jugadores de la Segunda División cuando ingrese a la asociación, según dijo el capitán Diego Godín a No Toquen Nada.
Por el contrario, la jueza mantuvo el embargo de las cuentas de los empresarios argentinos Hugo Jinkis y su hijo Mariano o de las sociedades en las que son titulares, como Full Play S.A, por entender que están dentro del marco de cooperación con Estados Unidos.
Además, Mainard archivó la causa contra los dueños de Full Play en Uruguay por entender que le asistía razón al pedido del fiscal de no reclamar la jurisdicción para juzgar a los empresarios argentinos por los mismos delitos que enfrentan en su país. La información hasta ahora recabada por la justicia uruguaya será puesta en conocimiento de Argentina.
Los Jinkis y su empresa fueron embargados en 2015 a pedido de Estados Unidos que los acusaba de pagar sobornos a dirigentes de la Conmebol. Luego, la empresa Full Play tuvo otro embargo por un pedido de ampliación de la Mutual en la causa contra Eugenio Figueredo y otros dirigentes de Conmebol.
Estos embargos le impidieron a Full Play realizar los pagos a la AUF por el contrato de televisación de los partidos de la selección e incluso la situación hizo que estuviera en peligro el contrato entre Full Play y la AUF, y la cláusula de prioridad para renovar el contrato para las próximas eliminatorias.
Godín dijo que para ellos la mutual no debió actuar de esta manera y no debe hacer ese tipo de gestiones. “Nunca se nos puso en conocimiento de que la mutual iba a llevar una denuncia así contra Full Play y que puede tener consecuencias importantes contra el gremio, en un tema que no los involucra y hasta los perjudica”, sostuvo.
El contrato entre Full Play y la AUF se firmó en febrero de 2015. La empresa argentina, dueña de los derechos de televisación de las nueve selecciones restantes, compró los partidos de la selección uruguaya en el Centenario. A cambio pagó 5.300.000 dólares en efectivo y le dio los derechos de los otros 81 partidos para que la AUF lo negociara para sí. Ésta los vendió a Tenfield en 10.600.000 dólares. El acuerdo también incluyó la posibilidad de que la asociación recibiera unos 2.000.000 de publicidad estática.
En el momento de la firma, Full Play pagó 1.000.000 de dólares y luego giró desde Full Play Perú la segunda cuota, de 500.000 dólares correspondiente al mes de agosto. Este segundo pago fue el primero retenido por la Unidad Antilavado por orden de la jueza Adriana de los Santos, quien ya no está al frente de esta causa, y continuará embargado.
