Incidencia del embarazo adolescente bajó de 16 a 14%

En 2016 Uruguay logró disminuir el peso del embarazo adolescente en el total de los embarazos después de varios años de estancamiento.

Actualizado: 12 de octubre de 2017 —  Por: Redacción 180

Incidencia del embarazo adolescente bajó de 16 a 14%

Cristina Lustemberg (Adhoc ©Ricardo Antúnez)

El 14% de los embarazos registrados en el país en 2016 implicó a madres adolescentes, dos puntos porcentuales menos que en 2015, informa Presidencia.

Así lo dijo este miércoles la subsecretaria de Salud Pública, Cristina Lustemberg, en la presentación de la campaña Mi plan adolescente que se enmarca en la “Estrategia intersectorial de prevención del embarazo no intencional en adolescentes 2016-2020”.

“Ese descenso significó que en el Uruguay nacieran 6.578 niños de niñas y adolescentes de entre 10 y 19 años. Y de este procentaje de esta cantidad, 123 estuvieron concentrados en las etapas de 10 a 14 años, donde está muy vinculadado a situaciones de abuso y de explotación sexual”, dijo Lustemberg.

Según las estadísticas, la maternidad entre personas en esa etapa se constata mayormente en los sectores más pobres y con más necesidades básicas insatisfechas. Una de cada cinco adolescentes (22,4 %) con dos o más de esas necesidades insatisfechas son madres, cifra que desciende al 3,6 % entre las adolescentes con necesidades básicas satisfechas (2014).

En tanto, tres de cada cuatro adolescentes madres abandonaron sus estudios antes de embarazarse (2014). El 57,7 % de las jóvenes de entre 25 y 29 años que iniciaron la maternidad en la adolescencia alcanzaron menos de nueve años de estudios, mientras que de las que cuentan con 13 y más años de estudio solo el 5 % fue madre adolescente (2015).

“Tres de cada cuatro madres que fueron adolescentes en esta etapa, el año anterior ya se habían desvinculado del sistema educativo. Nuestra alianza fuerte es con el sistema educativo. Fuimos escuchándolos, cuáles son las necesidades que tienen los adolescentes y que vayan construyendo su propio proyecto de vida. Esta enmarcado en una concepción de derechos, de diversidad, de la masculinidad, la estrategia tiene un rol muy importante de escucha y de relaciones entre pares. Que la elección para ser madre y padre sea elegida, en el momento en que ellos consideren mejor”, dijo Lustemberg.