Una vez ratificada la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de trasladar la embajada de su país en Israel de Tel Aviv a Jerusalén, el gobierno uruguayo emitió un comunicado crítico.
Además, el canciller Nin Novoa reiteró la posición histórica de Uruguay respecto a que Jerusalén sea considera como una ciudad de jurisdicción internacional, en el marco de la constitución de dos estados, uno judío y otro palestino, aprobada por la ONU en 1947. Nin Novoa agregó que la decisión de Trump era innecesaria y “pone en mucho peligro” las tratativas de paz.
En esas declaraciones, el canciller citó otra resolución de la ONU que en 1980 instó a los estados a tener sus embajadas en Tel Aviv, “la capital de Israel”.
Esto motivó una inusual respuesta de la embajadora Ben-Ami en Twitter.
Sorprendía y decepcionada de escuchar el canciller declarando que Tel Aviv es la capital de Israel. Capaz Salto es la capital de Uruguay? Israel tiene una capital, Jerusalén, ya 70 anos.La Knesset,los ministerios,la residencia del PM y del Presidente, la corte suprema, estan alli
— Nina Ben-Ami (@NinaBenAmi) 8 de diciembre de 2017
A raíz de este tuit, la Cancillería uruguaya citó a la embajadora “a fin de brindar explicaciones sobre sus comentarios”.
La reunión se concretó el viernes. “En dicha instancia, en el marco de la tradicional relación de amistad y cooperación que une a Uruguay e Israel, se instó a la Embajadora Ben-Ami a mantener los intercambios gubernamentales por los canales oficiales correspondientes”, dice un comunicado de Cancillería.
Jerusalén
Un artículo del Nwe York Times repasa la historia de la disputa por Jerusalén a lo largo del Siglo XX. Considerada como su capital por Israel desde 1950, la ciudad estuvo dividida en dos. La mitad occidental gobernada por Israel y la oriental por Jordanía. Fue en la Guerra de los Seis Días que Israel tomó control total de Jerusalén, incluida la Ciudad Vieja donde están los lugares sagrados para cristianos, judíos y musulmanes.
Este proceso se acentuó en 1980 cuando otra ley israelí declaró que “Jerusalén, completa y unida, es la capital de Israel”.
Sin embargo, esto fue resistido por la comunidad internacional y una resolución de la ONU consideró que esa adopción unilateral de Jerusalén como capital constituía “un serio obstáculo para el logro de una paz completa, justa y duradera” en la región. Esa resolución, además, instó a los estados miembros a mover sus representaciones diplomáticas a Tel Aviv.