Paraguay define sus candidatos para disputar quién sucede a Cartes

Oficialismo de derecha y oposición de centroizquierda definen en Paraguay este domingo sus candidatos para disputar la Presidencia en 2018. En el gobernante Partido Colorado la disputa est más reñida entre un "Chicago boy" y el hijo de un jerarca de la dictadura.

Actualizado: 16 de diciembre de 2017 —  Por: Redacción 180

Paraguay define sus candidatos para disputar quién sucede a Cartes

Santiago Peña junto a Horacio Cartes (NORBERTO DUARTE / AFP)

Con las primarias presidenciales y legislativas que se realizan el domingo, Paraguay arranca la carrera hacia las elecciones generales del 22 de abril de 2018.

En el gobernante Partido Colorado (derecha), el duelo es más reñido. El economista Santiago Peña (39 años), ex ministro de Hacienda y delfín del presidente Horacio Cartes, se enfrentará al disidente Mario Abdo Benítez, de 44 años e hijo de un exhombre de confianza del general Alfredo Stroessner, el dictador que gobernó Paraguay entre 1954 y 1989.

Cartes finalizará su período presidencial en 2018 con un crecimiento de 4,2% en la economía del país y una inflación de un dígito. 

A principios de 2017, Cartes intentó hacer una enmienda constitucional para permitir la reelección del jefe de Estado, el cual actualmente es electo por un mandato único de 5 años.

Pero la oposición puso en jaque la votación a marcha forzada de la reforma en el Congreso. El intento de enmienda constitucional provocó incidentes en el Parlamento que dejaron un muerto, heridos y la quema parcial del edificio el 31 de marzo pasado.

Cartes presenta a Peña como el "Emmanuel Macron paraguayo". Egresado de la universidad estadounidense de Columbia y ex funcionario del Fondo Monetario Internacional, el joven candidato sostiene en su campaña que quiere dar continuidad al gobierno de su mentor.

"La consigna es nunca poner en riesgo la estabilidad de la economía. (...) A diferencia de otros países de la región, Paraguay representa estabilidad y crecimiento", remarca.

Pero su rival en las primarias, Abdo Benítez considera que Peña es un "candidato artificial y como tal peligroso para la democracia, producto del capricho de Horacio Cartes".

Alianza opositora

En el Partido Liberal, la primaria opone a Efraín Alegre, un abogado de 54 años y exministro de Obras Públicas, y a Carlos Mateo Balmelli, ex canciller y expresidente del Congreso (56). 

Todas las encuestas coinciden en el triunfo de Alegre, quien fue derrotado por Cartes en las elecciones presidenciales de 2013.

Como para la elección de 2008, los liberales pactaron una alianza con el Frente Guasú (Frente Grande) que lidera el exobispo católico Fernando Lugo, presidente de Paraguay de 2008 a 2012, y actual presidente del Senado. 

La unión se produjo a cambio de la cesión al Frente Guasú de la vicepresidencia para Leonardo Rubín, un conocido hombre de radio.

"Los liberales han conseguido consolidar una alianza muy fuerte con los nucleamientos de izquierda y sus posibilidades de victoria en el 2018 son muy serias y reales", dijo a la AFP Francisco Capli, director de First Analisis y Estudios, una de las empresas más antiguas de sondeos en la región. 

A la alianza se sumó el movimiento Avanza País de Mario Ferreiro, el popular intendente (alcalde) de Asunción, quien figuraba hace cuatro meses al frente de las preferencias pero que renunció a sus aspiraciones presidencialistas para evitar un quiebre en la oposición. 

Ferreiro se ubicó tercero en la elección presidencial de 2013.

La alianza "desalojará con votos, democráticamente" a la agrupación cartista en el poder, en tanto el oficialismo "pagará caro el intento de rompimiento constitucional de marzo", dijo Alegre a la AFP.

Según Balmelli, "Peña y Abdo Benítez son dos jóvenes todavía muy verdes para dirigir los destinos de Paraguay. Ambos reflejan la crisis de liderazgo y de recambio que sufre el partido Colorado", estimó.

Para el sociólogo Raúl Fernández será difícil para la oposición derrotar a los colorados en 2018. "Hay una gran diferencia en organización, movilización y recursos económicos. El desafío es enorme", subrayó. 

El analista político Jorge Rubbiani sostuvo que en el sistema paraguayo hay "gran preponderancia del dinero en las movilizaciones".

"Si no se reparte plata, los candidatos no consiguen movilizar a nadie. De ahí que las patotas y barras bravas de los clubes de fútbol son enaltecidos y hasta declarados vigilantes de la democracia, debido a su capacidad de movilización", ironizó. 

 

(AFP)