Bergara reconoció que ven “presiones al atraso cambiario”, que los hacen actuar en una forma “agresiva para sostener el tipo de cambio”.
“La preocupación sobre temas del atraso cambiario la tenemos y por eso actuamos de esta manera”, dijo el presidente del BCU, y consultado sobre si reconocía la existencia de un atraso cambiario respondió: “no usamos ese término porque se asocia a cuando se administraba el tipo de cambio y se lo tiraba abajo de manera más artificial, nosotros evaluamos si hay alineamiento o desalineamiento”.
Bergara también añadió que en el BCU manejan varios modelos de los tipos de cambio, que llaman “de fundamentos”, es decir, que toman en cuenta muchas más variables en el concierto internacional.