La delegación observó con especial preocupación el acento carcelario del sistema de justicia juvenil y alentó al Estado a optar por un sistema que garantice la rehabilitación y la educación de los adolescentes.
Felipe Villavicencio, jefe de la delegación instó al “Estado uruguayo a destinar los recursos financieros y humanos necesarios para garantizar que los privados de libertad sean tratados en conformidad con los estándares internacionales, en particular las reglas Nelson Mandela y Bangkok”.
La delegación del órgano de las Naciones Unidas para la prevención de la tortura visitó lugares de privación de libertad en diferentes partes del país. Eo incluyó comisarías policiales, centros penitenciarios, centros de internamiento para adolescentes y unidades psiquiátricas. El SPT llevó a cabo entrevistas confidenciales e individuales con personas privadas de libertad, funcionarios del sistema penitenciario, de la policía y personal de salud, y también se reunió con autoridades del gobierno, la Institución Nacional de Derechos Humanos, el Mecanismo Nacional de Prevención y representantes de la sociedad civil, entre otros.
Tras la visita, el SPT presentará un informe confidencial al Gobierno del Uruguay, el cual el SPT alienta al Estado uruguayo para que lo haga público. El informe incluirá las observaciones y recomendaciones del SPT para la prevención de la tortura y los malos tratos de las personas privadas de libertad.