El Sindicato Médico del Uruguay, la Federación Médica del Interior y la Cámara de Especialidades Farmacéuticas y Afines (CEFA), que reúne a todos los laboratorios internacionales instalados en Uruguay, firmaron un acuerdo para reunirse periódicamente a trabajar en su relación.
“Si se hace una búsqueda en Google de lo que es relación la relación médicos e industria farmacéutica aparecen más de 450.000 citas, hay cientos de trabajos científicos que abordan el tema, que han estudiado el impacto de las estrategias de marketing de la industria sobre la lapicera a la hora de indicar un medicamento, no estamos innovando en ese sentido. Pero sí lo estamos haciendo desde este lugar, con esta realidad social y política del país”, dijo el presidente del Sindicato Médico del Uruguay, Gustavo Grecco.
El acuerdo tiene tres puntos. Uno de ellos refiere a la independencia de los actores y los otros dos definen que el paciente debe tener un rol central en su trabajo y que ambos, médicos y laboratorios, reconocen las normas y códigos éticos del otro.
“En cuanto a las influencias y demás no lo voy a describir aquí, desde lo sistémico a lo individual, muchísimo se dice y muchísimo con certeza, algunas veces, sin generalizar. Y hablamos del vínculo con el paciente en el consultorio al realizar una prescripción hasta el sistema, más aún, hasta la sustentabilidad del sistema”, sostuvo Grecco.
La firma de este acuerdo se dio una semana después de que el subsecretario de Salud Pública, Jorge Quian, dijera en un seminario que algunos abogados “trafican con la angustia y el miedo a morir de los pacientes” y que los países como Uruguay sufren “un abuso gigantesco” por parte de la industria cuando a través de la ley de patentes se retrasa la aparición de genéricos para mantener el alto precio de los medicamentos.
Gustavo Zerbino, presidente de la Cámara Farmacéutica, fue el único de los oradores que leyó un discurso y pidió que si alguien tiene datos de irregularidades que haga la denuncia.
“Los comentarios a menudo atribuyen actividades aisladas a la industria farmacéutica y al cuerpo médico en general. Por eso es fundamental rechazar todo tipo de generalizaciones atribuyendo conductas inapropiadas a toda la industria y a todos los médicos. Quien acuse, que identifique y aporte las pruebas”, afirmó.
Médicos actualizados son menos permeables
Grecco dijo que para que los médicos sean menos influenciables se debe trabajar en la recertificación, o sea la revalidación y actualización de conocimientos.
“Nuestro país está en deuda en muchos aspectos y algunos escapan a este ámbito. Por ejemplo, es de máxima importancia la ausencia del desarrollo profesional médico continuo sistémico y la recertificación. En esto nuestro país está en deuda, el médico que actualiza periódicamente sus conocimientos, indudablemente, es menos permeable a presiones, si es que existen esas presiones, cuando existen esas presiones”, aseguró.
