Pese a la preocupación por el aumento del Índice de Precios al Consumo (IPC), que acumula un incremento de 4,13% en enero-junio y un 8,00% en el año móvil, "en los próximos meses vamos a ir logrando una convergencia gradual pero sistemática hacia el rango meta" (4%-6%), dijo el ministro de Economía, Fernando Lorenzo.
A su vez, ratificó que este año y los tres subsiguientes Uruguay puede crecer a una tasa de 4% anual, superando el escenario "incierto" que se presenta a nivel global, en el que destacó el deterioro de los principales índices macroeconómicos en Argentina.
Este año sería el décimo año consecutivo de crecimiento de la economía uruguaya que en 2011 se expandió un 5,7%, cifra levemente inferior al pronóstico del gobierno y que retomó el vigor en el primer trimestre de 2012 con una expansión de 4,2% en relación a igual período del año anterior.
Lorenzo destacó la liquidez que tiene el gobierno en sus arcas, que le da mayores opciones de maniobra ante las crisis, y "la desdolarización de la deuda del gobierno" que en la actualidad está "apenas por encima del 45%", donde cayó desde el 74% registrado cuatro años atrás.
En contrapartida, los costos para mantener una alta liquidez y el sobrecosto energético debido a la sequía, que el gobierno asumirá sin trasladarlo a las tarifas, generan un aumento del déficit fiscal que obligó a las autoridades meses atrás a anunciar un corrimiento en la previsión a un 1,7%, una décima más que el proyectado en 2011.
El año pasado el déficit fiscal uruguayo fue de 0,8% del Producto Interno Bruto (PIB).
Lorenzo hizo estos comentarios en la presentación ante la prensa de la Rendición de Cuentas que prevé que la salud reciba 757 millones de pesos adicionales, la protección social 499 millones, la educación 488 millones, la vivienda 200 millones, la seguridad 196 millones, el desarrollo productivo 117 millones, según detalló. En otros ítems el gasto se incrementará 313 millones de pesos.
El total del gasto adicional incluido en el proyecto es de 2.747 millones de pesos.
