Este martes a partir de las 10 de la mañana y por tres meses, dos fisioterapeutas y dos auxiliares trabajarán en la piscina con los alumnos tres veces por semana.
En la Roosevelt se brinda atención integral a niños y jóvenes con discapacidad motriz y trastornos asociados desde los dos hasta los 18 años. Hoy tienen 70 alumnos.
El dinero para poner a funcionar el servicio se consiguió a través de una jornada de venta de ñoquis que cocinó el chef de la selección Aldo Cauteruccio.
Cauteruccio contó a No toquen nada que cuando llegó a la escuela encontró "tremenda infraestructura pero sin poder utilizarla". "Los niños están en sillas de ruedas, imaginate que puedan flotar; pasan por la piscina, la ven y no la pueden usar. Para el que lo ve es tremendo", señaló.
La escuela se sustenta con aportes del Estado, empresas, socios y colaboradores particulares. También está incluida en el régimen de donaciones especiales, pero no puede recibir dinero por este modo porque perdería una partida de dinero que le da el MIDES.
La piscina de hidroterapia es un ejemplo emblemático de los problemas financieros que vivió la institución durante los últimos años.
En 2005, la Escuela hizo esta piscina para hidroterapia con financiamiento que se consiguió gracias a un programa de televisión, pero a los dos años no pudieron usarla más por falta de dinero.
En 2016 el presidente de la Escuela, Enrique Singlet, dijo a No toquen nada que todo comenzó "con el programa de Canal 10 'Desafío al Corazón'". "Fuimos la primera institución que participó. Con lo recaudado hicimos la piscina, que funcionó durante dos años y medio. La piscina no era solo la piscina, nos embalamos mucho: era la piscina más un sistema para que el agua esté bien, más un sistema de temperatura, más el aislamiento, más el techado. O sea, es una inversión bastante grande", explicó.
Además la escuela realizó un convenio con Casa de Galicia para que la institución use el servicio de hidroterapia dos veces por semana.
La Roosevelt pretende lograr a través de este tipo de convenios que se mantenga en funcionamiento la estructura.
Cauteruccio dijo que es necesario que otras instituciones se acerquen a trabajar en conjunto.
"La escuela no tiene solamente la idea de que ellos lo puedan usar y nada más. Hay otro montón de chicos y de lugares que lo pueden utilizar también y están las puertas abiertas no solamente para esa infraestructura sino para las que tiene la escuela. Que se arrimen, que planteen, y vemos entre todos qué es lo que se puede hacer. Eso es realmente lo que la escuela quiere y es la manera de ayudar entre todos y cubrir las necesidades de un montón de gente", dijo.
Meses de trabajo y el Servicio de Hidroterapia de la Escuela esta funcionando gracias a la ayuda de todos fue posible 👐@AldoCauteruccio pic.twitter.com/s2hhpZd3qC
— Escuela Roosevelt (@LaRooseveltOk) 25 de julio de 2017
