El "Ronco" López llora como un niño, los jugadores no se quieren ir de la cancha, los hinchas saltan y gritan en la tribuna. El viejo y bravo Rampla vivió en el Franzini una noche pletórica tras derrotar 4 a 0 a su rival peruano.
Impulsado por los miles de hinchas que concurrieron al Parque Rodó, el Picapiedra arroló desde el inicio a un adversario que no sabía ni dónde estaba parado.
La misión de revertir los dos goles empezó a ser posible cuando a los 14 Julián Lalinde anotó el 1 a 0. El gol coronó un soberbio inicio del equipo de López.
Dueño del partido, Rampla siguió buscando y a los 21 minutos logró el segundo gol: Panzariello levantó apenas al balón, a la carrera por la izquierda, y alcanzó a Olivera quien se estiró para mandar la pelota al fondo del arco peruano y puso las cosas en igualdad entre los dos equipos.
En el segundo tiempo, Rampla se fue arriba con todo en busca de rematar el encuentro y conseguir la clasificación. UTC Cajamarca reforzó el ataque con el objetivo de marcar un gol que obligara al local a convertir dos más.
En ese ida y vuelta llegó el tercero del Picapiedra. El brasileño Igor metió un cabezazo perfecto a los 57 que hizo delirar a los hinchas.
A los 80 el equipo peruano se quedó con 10 hombres en cancha por la expulsión de Benjamín Ubierna.
Los de López aprovecharon el momento y fueron por liquidar la serie, algo que consiguieron a los 83 minutos cuando Matías Rigoleto hizo un verdadero golazo.