Los zapatos fueron donados por personas de todo el país a la organización Avaaz para realizar esta acción.
"Son 7.000 pares de zapatos para cada niño que ha sido asesinado por un arma desde el tiroteo de la escuela primaria de Sandy Hook" en 2012, informó la organización.
Luego de exhibirse los zapatos serán donados a refugios para personas sin hogar.