En un juego cambiante y con polémica, Malvín frenó el envión de Aguada en las finales y volvió a sacar ventaja. El resultado deja al Playero a una victoria del título.
Malvín dominó casi todo el partido, aún cuando las faltas condicionaron a sus internos. Passos y Kamp debieron salir por cuatro faltas y López apeló a un equipo chico, que se cerró en la pintura y le permitió a Aguada lanzar. Los de Cabrera ni pusieron la pelota abajo ni acertaron desde afuera.
Fue en ese lapso donde McGuire apareció por primera vez en las finales, tomó responsabilidades y lideró a Malvín. Acompañó a la perfección Marcel Souberbielle, mucho más regular y parejo en todos los partidos.
Aguada leyó mal el partido y para colmo tanto Smith como Feeley salieron por quinta falta. Perdido por perdido, los nacionales sacaron la lanza y descontaron una desventaja de ocho puntos.
Así se llegó al último minuto con un final cerrado en el que los jueces dejaron sin sanción una tremenda falta sobre Hatila Passos y luego pitaron un antideportivo de Demian Álvarez al que le agregaron un técnico. Eso le permitió a Malvín asegurar la victoria.
Souberbielle terminó con 19 puntos, McGuire con 17 y Cabot con 14. En Aguada, Smith fue el goleador con 22 puntos.