Para un recién nacido es un “disparate” esperar dos meses por la familia que lo va a criar

El médico pediatra neonatólogo José Luis Díaz Rossello dijo en No Toquen Nada que los recién nacidos cuyos casos son judicializados tienen tiempos de espera no adecuados para acceder a la familia que va a criarlos, a pesar de que se cumple con la ley. “A las leyes hay que actualizarlas”, afirmó.

Actualizado: 15 de agosto de 2018 —  Por: Redacción 180

Para un recién nacido es un “disparate” esperar dos meses por la familia que lo va a criar

AFP

Díaz Rosello publicó un artículo en la revista de la Sociedad de Pediatría del Uruguay, junto a Fernanda Blasina y Pía Correas. “La violencia invisible. El recién nacido en espera de una familia que lo críe”, se tituló.

En el trabajo se citan datos oficiales del Hospital de la Mujer del Pereira Rossell, que muestran que en 2017 hubo 179 judicializaciones de recién nacidos cuyas madres no podían criarlos. Pero según los especialistas hay más casos en otras instituciones, solo que la información no está disponible.

En el artículo se plantea que esos recién nacidos, en vez de iniciar su socialización al nacer con la familia que los va a criar, deben esperar un “lento proceso centrado en determinar quién tiene derecho a cuidarlo”.

"Mientras espera por esa familia pasan días y semanas, y él no encuentra a quien cautivar. Hay una persona que lo está alimentando, que lo sostiene, pero no lo está criando”
—Rosello.

“Un recién nacido tiene todas las condiciones, salvo que lo pongan a esperar, para cautivar a varios. Tal vez la nuestra es la única especie animal donde el hecho de un nacimiento convoca a todos. Pero mientras espera por esa familia pasan días y semanas, y él no encuentra a quien cautivar. Hay una persona que lo está alimentando, que lo sostiene, pero no lo está criando”, dijo Díaz Rosello.

Según plantean los profesionales, la pérdida de oportunidades con ese recién nacido se da desde el primer día y hasta los primeros cuatro a seis meses, con un daño “irreversible”. Por eso, la solución que proponen es asegurar que quienes van a criarlo estén con él desde el primer día.

“Esos tiempos, que son psíquicos, nos obligan a alertar que el recién nacido es diferente al niño de tres meses. Por eso es un disparate el tiempo de espera que existe hoy, a pesar de que sea legal, a las leyes hay que cambiarlas. Dos meses es un disparate para una necesidad que tienen en el primer minuto, en los primeros 30 minutos o una hora de vida. Es mucho tiempo para personas crono sensibles y nosotros lo somos”, afirmó.

El tema de fondo con respecto a este tema es reconocer un nuevo paradigma, que le da un nuevo significado el término “familia biológica”. En ese nuevo concepto se denomina a la mujer que concibe en su vientre y al hombre que la fecundó como “padres de origen”. Pero los adoptantes también son padres biológicos.

"Un padre que cría a un hijo solo o una pareja homosexual que tiene un bebé recién nacido tiene los mismos cambios que una madre que acaba de engendrar"
—Rosello.

“La diferencia, y ese es el gran nuevo concepto, es que estas actividades se pueden producir en cualquiera de los dos géneros. Un padre que cría a un hijo solo o una pareja homosexual que tiene un bebé recién nacido tiene los mismos cambios que una madre que acaba de engendrar. Es más, en una pareja que está criando un hijo de origen, que engendraron juntos, la oxitocina, que es la hormona del parto, tiene la misma elevación en los dos, o sea que el recién nacido provoca en el adulto cambios biológicos”, explicó.