Socio cumple 10 años sonando y soñando fuerte

El décimo aniversario de la banda de Fede Lima llegó por sorpresa y sirvió de estímulo para encarar una nueva etapa vital, más madura. Estos días lanzaron dos nuevos temas, al modo de los antiguos simples, y el festejo será el sábado 8, en La Trastienda.

Actualizado: 29 de agosto de 2018 —  Por: Mauricio Erramuspe

Socio cumple 10 años sonando y soñando fuerte

Fede Lima (Adhoc ©Javier Calvelo)

“Mis sueños gritan como película de Kung Fu” canta Fede Lima en uno de los dos nuevos temas de Socio. Kung Fu y Breakdance son canciones en las que él encuentra respuestas a preguntas que había planteado en Mini Glorias, su anterior trabajo. Así lo siente.

A finales de 2017 la banda estaba un poco quieta. Uno de los integrantes acababa de ser padre. Además, querían incorporar un nuevo guitarrista. Durante un asado se dieron cuenta de que este año cumplían un aniversario redondo y esa sorpresa les sirvió de disparador para que las cosas comenzaran a rodar.

El hijo del bajista creció, el nuevo guitarrista apareció, incorporaron manager, aparecieron fechas para tocar y dos nuevas canciones para mostrar. Todo en muy corto tiempo.

Los nuevos temas son una especie de lado A y B de los simples que se lanzaban en la época del vinilo. A los 43, Fede Lima hace un balance en estas letras que hablan de su infancia en Rocha pero también de lo que le pasa hoy.

“Llegué hasta acá, maduré un montón de cosas. Si Mini Glorias eran preguntas, estas son las respuestas”, dice. Respuestas que adelantan un cambio en las letras y músicas de un compositor que sigue soñando y con ganas de “hacer un montón de cosas”.

¿Cómo es eso de darte cuenta, por sorpresa, de que cumplís 10 años como banda?

No sé... fue como que la banda estaba un poco parada. De ahí la sorpresa. En ese momento éramos tres, habíamos quedado el tecladista, el baterista y yo. No teníamos guitarrista, el bajista había sido padre, estábamos desperdigados.

Después del verano apareció el bajista, el gurí creció. El Sebo (Sebastián Delgado, el nuevo guitarrista) apareció también y fue muy gracioso porque conseguimos guitarrista y al otro día conseguimos manager que tampoco teníamos y hasta arreglamos unas fechas. De un día para el otro pasamos de estar bastante quietos a tener un montón de cosas. Fue un impulso de energía bastante grande.

También teníamos la visión de empezar a generar merchandising de la banda. Nunca lo habíamos hecho. Yo en este momento me estoy encargando de hacer remeras, vinilos. Estamos por editar en vinilo Socio de cámara, que solo fue digital.

Es un poco raro eso de ir de un registro solo digital a un vinilo, ¿no?

Está buenísimo, estamos viviendo un momento de polos opuestos: el streaming que es un intangible, una tecnología nueva, y un vinilo que es una cosa totalmente arcaica. A su vez, el streaming ha traído algo parecido al vinilo, la idea del simple. Ya no es tanto el disco sino un tema o dos, muy parecido a lo que pasaba en esa época del 50 o 60.

Hace unos días sacamos dos temas con esa idea, un lado A y un lado B, un simple: Kung Fu y Breakdance. Y también lo vamos a editar en un simple en vinilo.

En Mini Glorias, tu trabajo anterior, habían dejado un poco las máquinas para volver a tocar los instrumentos. ¿Cuál es el sonido que están buscando en esta etapa?

Kung Fu y Breakdance son canciones que salen sueltas pero que tienen algo que ver con Mini Glorias. Para mí, cuando las vi terminadas, me pareció que tenía un sabor a continuación de algo y al mismo tiempo es como terminar algo. Si me apurás te diría que Mini Glorias fueron las preguntas y Kung Fu y Breakdance las respuestas.

Ustedes dicen que la incorporación del nuevo guitarrísta, Sebastián Delgado, marca una nueva sonoridad en la banda. Al escuchar estos temas se siente mucho esa guitarra.

Hay como una energía que el Sebo ayudó a capitalizar pero que ya estaba en la banda. El Sebo trajo una impronta y nosotros tenemos la idea de que cuando ingresa alguien nuevo a la banda, no venga a hacernos los deberes. No es que le decimos cómo es el tema y tiene que aprenderlo. Dejamos que cada persona venga y traiga su impronta. Ese ingrediente nuevo en la olla, se revuelve y da una comida nueva. Él tiene una influencia más Red Hot Chili Peppers, Marley y dejamos fluir un poco eso. Y se nota en la grabación.

Es algo que la gente notó, es una energía nueva. Si te podés a ver hasta la velocidad de los temas cambió. Son los temas más rápidos que hemos grabado.

Supongo que eso también trajo un cambio en cómo te parás en los shows. En general sos más tranquilo pero estos temas y esta nueva velocidad te van a hacer mover más, con más intensidad.

Sí, de hecho el show que venimos preparando es intenso. A Kung Fu ya la tocamos en vivo dos veces y el show cambió, hay una cosa más punky en el escenario.

¿Y te gusta?

Me encanta. Hay pila de temas en los que no voy a tocar la guitarra, solo voy a cantar. Es algo nuevo. Vuelvo un poco a lo que hacía en Loop Lascano, allá en 1998: ser solo frontman. Está buenísimo y lo estoy disfrutando pila.

En una nota que hicimos cuando salió Mini Glorias vos analizaste bastante las distintas etapas de la banda y en Socio eso no es menor porque no es una banda que se quede quieta a nivel musical sino que va cambiando.

Una cosa que vimos en estos 10 años es que la constante fue el cambio. De hecho, el año que viene seguramente vamos a cambiar de nuevo. Yo ya la intuyo por lo que está pasando en los ensayos. No se están generando temas nuevos en los ensayos pero sí se está generando pedacitos nuevos de música. Hay como una idea de cambio hasta en las letras.

¿Y cómo se hace para estar atento a esas cosas, en el ensayo comenzar a percibir esas cosas? ¿Cómo lo mirás “desde arriba”, por decirlo de alguna manera? Debe ser interesante para un artista ir viendo esos procesos al mismo tiempo que los protagoniza o lidera.

Yo creo que fue cambiando al tiempo que la banda tiene más injerencia en los arreglos y en la música. Es menos unidimensional. Se va enriqueciendo de lo que aportan los demás y eso se nota en Kung Fu y Breakdance.

Daniel Andino, de Bizarro, cuando escuchó los temas me dijo: “qué montón de música que hay en estas canciones”. Eso es lo que cambia. Antes la cosa era más simple porque quizás venía más con mi impronta. Ahora ellos tienen libertad y se nota la riqueza.

En la banda jodemos como que hay un ala académica y una burra. Yo soy del ala burra. Pero la parte académica está prendida fuego. Se nota en el bajo, la guitarra y las teclas que hay una fuerza mayor, aparece en los arreglos, hay un montón de notas que antes no había. Eso genera vértigo.

En las letras Kung Fu y Breakdance remiten a los 80. ¿Fue buscado?

Fueron dos temas que salieron medio juntos, son medio como hermanos. Son dos canciones que hablan de películas. Breakdance es la historia de una película, de ir al cine y ver esa película que me marcó mucho porque descubrí el hip hop, tenía nueve años. Fue un día muy especial. Kung Fu, lo mismo.

Son letras que hablan mucho de mi infancia y a su vez de la actualidad. Son letras como de balance, llegar a la mitad de la vida, tengo 43 años. Llegué hasta acá, maduré un montón de cosas. Por eso decía que si Mini Glorias eran preguntas, estas son las respuestas. Es como que pasan una raya, hay cosas que se redondearon.

Por eso creo que va a haber un cambio en las letras. Hay cosas de cuestionamientos personales que ya no están y que se cierran ahí.

Me gusta mucho el cine y en esas dos canciones, no sé por qué, se dio el paralelismo entre la película y la vida. En el caso de Breakdance tiene algo así como la primera cita amorosa, mezclada con el descubrir una música que es la tuya, no es la de tus padres. Fue eso. Kung Fu es la madurez, la pasada de raya, de tener 43 años y ganas de hacer un montón de cosas. “Mis sueños gritan como película de Kung Fu” es encontrar un ejemplo de lo que estás viviendo ahora después de todos estos años.

Una capacidad de soñar fuerte.

Ahí va, es algo fuerte. Y eso se ve reflejado en las canciones, un montón de música, velocidades más rápidas. Hay un vértigo que antes no estaba.

Esa madurez de la que hablás también puede estar en el tema de los roles de cada uno en la banda. Quizás aprendiste a delegar un poco, antes concentrabas más.

Me costó mucho delegar. Me cansaba mucho pero no sabía cómo hacer para decir que otro hiciera algo y olvidarme. “Confío en vos que sé que está buenísimo lo que vas a hacer”. Es madurez, confiar en el otro. También lo construimos juntos, esas personas que están en la banda hace tanto tiempo fueron ganándose ese lugar. Fueron 10 años de ser amigos, de compartir la música y ahora es un equipo.

 

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