Este dato corresponde a la medición de la actividad sin tomar en cuenta la refinería de petróleo, que por el efecto rebote de la parada técnica de la Refinería de la Teja del año pasado, tiene un impacto positivo muy considerable (con refinería la actividad industrial aumentó 14,8%).
Además, en lo que va del año, la industria muestra un 4% menos de personal ocupado que en igual período del año pasado.
La división con mayor incidencia negativa en la actividad industrial es “Elaboración de Alimentos y Bebidas” con una caída de 6,3% en lo que va del año y una incidencia 2,5 puntos porcentuales que explican buena parte del desempeño global negativo de la industria manufacturera.
De lado de las divisiones con desempeño positivo, además de la producción de derivados de petróleo, las máximas incidencias positivas corren por cuenta de las divisiones “Fabricación de Minerales no Metálicos” (División 26, aumenta 24,1% e incide 0,5 p.p.), “Fabricación de Madera y Productos de Madera” (División 20, aumenta 14,6% e incide 0,3 p.p.) y “Fabricación de Productos de Caucho y Plástico” (División 25 aumenta 8,4% e incide 0,3 p.p.)
