En una entrevista a la AFP en Japón, el director técnico platense, de 47 años, que llegó al cargo a principios de 2016, sabe que es difícil pero cree que hay posibilidades de ganar un partido, centrando sus esperanzas en Fiyi, contra la que debuta el miércoles en Kamaishi, o Georgia, sus dos primeros rivales en un grupo que completan Gales y Australia.
A Georgia ya la ganó en el Mundial de Australia-2003, cuatro años después de haber derrotado a España en Gales-1999. Tras no vencer en ningún encuentro en Inglaterra-2015, los Teros buscan en Japón su tercer triunfo en la historia del torneo.
Tras su paso por el club argentino CUBA y la selección uruguaya, el técnico anuncia que buscará nuevos retos después del Mundial, tras terminar su ciclo con los Teros.
¿Cuáles son los objetivos y expectativas de Uruguay en este Mundial de rugby?
"Tenemos como expectativas mostrar cómo ha evolucionado Uruguay en estos cuatro años, tanto en lo físico como en lo técnico. Nuestro objetivo es jugar partidos de este nivel contra equipos como Fiyi o Georgia en una Copa del Mundo. Tener un buen partido va a hablar muy bien de Uruguay. Para el futuro de Uruguay es bueno tener este tipo de partidos, ya que con la competencia con estos equipos se puede mejorar".
¿Qué posibilidades tiene Uruguay de ganar un partido en este Mundial?
"Las hay. Tenemos que jugar perfecto, no equivocarnos, jugar a lo que le conviene jugar a Uruguay, pero en los dos primeros partidos es dónde más posibilidades hay para ganar. Vamos a por esos dos partidos, que es donde nosotros vemos que tenemos alguna posibilidad. Obviamente Australia y Gales están en otro escalón, están en otro nivel. Pero tener tres o cuatro partidos de este nivel ya es bueno. El objetivo de Uruguay es tener más competencia contra este tipo de equipos para poder seguir evolucionando en su juego".
¿Cómo ve a sus jugadores de cara a este Mundial?
"Están con mucha ilusión, con los pies en la tierra, sabiendo donde están parados. Están muy bien, con la intención de cumplir con los objetivos que estaños trayendo a este Mundial. Lo veo muy bien al equipo, con nivel bastante parejo y eso genera herramientas para poder rotar, para poder crear distintos escenarios ante los distintos rivales, que es lo que vamos a necesitar, porque van a ser partidos duros. Tener un plantel lo más parejo posible en todas sus líneas es lo que nos va a permitir tener buenos partidos y poder cumplir con nuestros objetivos".
¿Qué necesita el rugby uruguayo para seguir creciendo?
"Para crecer es necesario la competencia. A partir del año que viene se va a empezar a jugar la liga sudamericana y va a haber dos equipos profesionales en Uruguay que van a competir contra equipos de Argentina, de Brasil, de Chile, de forma profesional. Eso va a ser un gran paso. Tener una estructura profesional en Uruguay, con jugadores uruguayos, va a ser una evolución muy grande para el rugby uruguayo".
¿Cuál sería un buen resultado en el Mundial para Uruguay?
"Un hacer historia. Posicionar al rugby donde podemos posicionarlo. Un triunfo ayudaría a posicionarlo de esa manera y que la World Rugby siga confiando en Uruguay y que siga viendo la evolución que ha tenido todos estos años. Uno de los objetivos es estar a la altura de las circunstancias y poder tener un buen resultado en estos cuatro partidos".
¿Cuál es su futuro como técnico tras el Mundial?
"Tras el Mundial termina mi contrato. Tengo mi familia que está viviendo en Argentina, con lo cual ha sido un esfuerzo importante. Después del Mundial llevaría a mi familia donde yo tenga que ir. La verdad es que estuve muy cómodo en la selección de Uruguay, tanto con el staff como con los jugadores. Han sido cuatro años donde se han logrado cosas interesantes y donde hemos tenido buenos resultados, pero creo que fue un proceso y que está bien darle espacio a otros".
¿Regresará a Argentina o irá a otro país extranjero?
"Estoy abierto a todo y todavía no tengo decidido nada. Es cuestión de escuchar las ofertas que surjan".
