“La comisión entendió que no explicó la base de las acusaciones, que implica la serie de convenios irregulares firmados con personas de su partido”, explicó a Folha de Sao Paulo el presidente de la Comisión, Sepúlveda Pertence. La decisión se tomó por unanimidad.
Lupi pertenece al Partido Democrático Trabalhista, uno de los aliados del gobernante Partido de los Trabajadores.
Cuando compareció ante el Senado para responder a las acusaciones, Lupi las negó y dijo que solo lo sacarían del gobierno de un balazo. La decisión de la Comisión sería esa bala, según estimó el senador oficialista Romero Juca. “No sé si es mortal, pero es una bala”, señaló.
Las explicaciones de Lupi fueron consideradas insatisfactorias e inconvenientes y la sanción propuesta es la más grave que puede tomar esa comisión. Queda ahora a la presidenta Rousseff definir qué hará con el ministro.
Las denuncias
Lupi fue acusado por la prensa este sábado de nuevas presuntas irregularidades, en un escalada de denuncias que se inició el 5 de noviembre y que amenaza con sacar del gobierno al sexto ministro por corrupción desde junio.
Lupi, que ejerce el cargo desde 2007, fue acusado por el diario Folha de Sao Paulo de haber recibido sueldo como asesor "fantasma" en la Cámara de Diputados entre 2000 y 2006. Durante ese período Lupi casi nunca estuvo en la Cámara y "se dedicaba exclusivamente a tareas" como vicepresidente del Partido Democrático Trabalhista (PDT), según ex asesores, diputados y ex congresistas que hablaron con Folha bajo anonimato.
El periódico, que reveló la copia de un documento oficial con el nombre de Carlos Roberto Lupi como asesor técnico de la Cámara, aseguró que el ministro recibió durante esos seis años "el mayor salario como asesor" sin estar gran parte del tiempo en Brasilia, como lo ordenaba la ley.
El ministro, a través de sus asesores de prensa, aceptó que "en algunos períodos" fue asesor legislativo del PDT pero "negó que hubiera incumplido la ley", señaló Folha.
Por su parte, la revista Veja publicó un testimonio de un trabajador mecánico de Sao Paulo que denunció un intento de soborno por parte de un asesor del ministro en 2008.
"Me pidieron un millón de reales (unos 529.000 dólares)" para expedir el registro del sindicato que quería crear, dijo Irmar Batista, y agregó: "Varios sindicatos fueron extorsionados, pero la gente tiene miedo de declarar". Según Veja, "el gobierno fue alertado del caso hace nueve meses por sindicalistas" del Partido de los Trabajadores (PT), pero no se hizo nada".
Las denuncias comenzaron con un artículo de la revista Veja a inicios de mes que relacionaba a un asesor del ministerio -ahora suspendido- con supuestos sobornos a organizaciones que suscribieron contratos con esa cartera.
Lupi fue acusado luego de haber autorizado la creación de sindicatos fantasmas, y de haber viajado en un avión alquilado por el responsable de una organización que tiene contratos con el gobierno.