Este martes ninguna de las autoridades del gobierno mencionó que la leche fortificada estuvo incluida en las canastas del Instituto Nacional de Alimentación (INDA) hasta mayo de 2009 y que dejó de entregarse por una decisión del gobierno, cuando se pasó de la canasta a la tarjeta en el Plan de Equidad.
El programa de canastas con leche fortificada había ayudado a bajar a la mitad la anemia de niños de barrios carenciados de Montevideo.
Cuando la gente dejó de recibir la leche fortificada en la canasta y podía optar dentro de sus compras con tarjeta, dejaron de comprarla porque la leche común es más barata.
En mayo de 2009, Ana Olivera (en ese momento viceministra de Desarrollo Social), dijo a No toquen nada que ese tema se les pasó.
No toquen nada consultó al ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, sobre el pasaje de la canasta del INDA a la tarjeta del Plan de Equidad, que dejó sin leche fortificada a quienes tenían el beneficio. El ministros dijo que no conocía ese proceso y agregó que también desconocía los logros conseguidos hasta ese momento. "Hubo muchos proyectos institucionales que nadaron en la falta de un responsable directo que asumiera el liderazgo. Cuando el Mides asumió el liderazgo a través de la tarjeta, el proyecto salió rápidamente", señaló.
La solución que llegó tres años después establece que la tarjeta tiene un cupo específico, por fuera del monto, que sólo puede canjearse por un kilo de leche por mes por persona. La leche se llama MAS y está destinada a mujeres embarazadas, mujeres en los primeros 6 meses de lactancia y niños de 6 meses a 3 años, que fueron identificados dentro de los usuarios de la tarjeta. Conaprole elaborará y distribuirá la leche en 800 comercios solidarios.
El subsecretario de Desarrollo Social, Lauro Meléndez, dijo a No toquen nada que la licitación duró más de dos años porque no encontraban gente que se presentara. "Estaba la concesión de que el Estado pagaba tarde y mal. Es cierto, el Estado antes pagaba mal, 60 u 80 días después. Pero ahora el Estado estaba pagando la mercadería y luego se empezó a negociar hasta que se llegar a este precio razonable", señaló.
Según la encuesta sobre estado nutricional de 2011, el 31% de los niños uruguayos de entre seis y 24 meses tiene anemia. La OMS considera que cuando los casos de anemia superan el 5 % debe considerarse que hay un problema de salud pública.