El jueves La Junta Departamental de Montevideo aprobó por unanimidad el proyecto del estadio de Peñarol. La decisión tomada es la de facultar a la Intendencia de Montevideo a autorizar, con carácter precario y revocable, la implementación del proyecto en un terreno ubicado en la Ruta Nacional Nº102, entre camino Mangangá y camino de los Siete Cerros.
Según Viviano, lo que se dio fue una señal que no adelanta los procesos pendientes, como el de recategorizar el suelo sobre el que se proyecta la construcción, que actualmente está en la categoría “rural” y que debe pasar a la categoría “urbano” para que se permita la implantación (hay tres tipos en Montevideo: rural, no urbano y urbano, y muchos estadios están construidos en suelos "no urbanos").
“Eso quedó pendiente, lo que determina que este expediente vuelva en algún momento a la Junta, o que por otra vía se tenga que encarar esta modificación, que es necesaria”, explicó Viviano.
Por otra parte, Viano sostuvo que la aprobación definitiva del proyecto está condicionada además por la realización de un Estudio de Impacto Territorial Integral sobre los inmuebles que abarca y su zona de influencia.
La Junta calificó al terreno como válido para la construcción y resolvió que está en condiciones. A partir de ahora deberán hacerse estudios sucesivos para determinar temas de seguridad, accesos y cuál es la contraparte para Peñarol.
También se aprobó una comisión de seguimiento del proceso, integrada por representantes del Legislativo Departamental, Ejecutivo Departamental, Gobierno Municipal y Consejo Vecinal 9.
Peñarol todavía no compró el terreno, y suponen que si propusieron esto, primero corresponde que se resuelvan los asuntos de dinero y segundo cumplir con todas las exigencias.