La Olimpíada de Astronomía es un evento académico y científico que reúne a jóvenes de países de Latinoamérica que se celebra desde 2009.
En Uruguay, los jóvenes que quieren participar se anotan por internet. Las dos primeras pruebas son online y la tercera (la “final”) es presencial.
En 2012 hubo 20 chicos en la tercera prueba. De ahí salen los cinco seleccionados que conforman un grupo que debe ser mixto. En 2011 se anotaron 1500 a la primera prueba y en 2012 se inscribieron 890.
Para los pasajes se consiguió ayuda del Ministerio de Educación y Cultura y del Programa de Desarrollo de Ciencias Básicas. “Se fue juntando plata de distintos lugares”, explicó a 180 la docente que acompañó a los jóvenes a Colombia, Nancy Sosa.
Ella entiende que Uruguay corre con ventaja en la competencia porque existe la materia Astronomía, que se dicta en cuarto año, en la que los jóvenes ya adquieren conocimientos y los profesores los motivan a participar de la Olimpíada.
Esta vez 24 estudiantes participaron de esta competencia que duró una semana (del 9 al 15 de setiembre). El evento tuvo a ocho países representados: Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Brasil, México, Colombia y Chile. El país organizador se encarga de comida, hoteles y demás gastos.
La Olimpíada consta de cinco pruebas: las tres primeras son individuales e incluyen ejercicios de astronomía, observación en el Planetario y una “prueba a cielo abierto”, que esta vez no se pudo hacer porque estaba nublado, por lo que se realizó una prueba simulada; además hay dos pruebas grupales, en las que se juntan tres jóvenes de distintos países y hacen ejercicios y arman cohetes a los que se les evalúa el alcance y la altura que logran.
IV Olimpíada de Astronomía
Todos los uruguayos que participaron ganaron premios: Mayra Rodríguez se llevó una mención de honor, Carolina Reolon obtuvo una medalla de bronce, Agustín Servetti y Félix González ganaron medalla de oro y Bernardo Regusci se llevó una medalla de oro y un reconocimiento al mejor trabajo en equipo.
Sosa, que es licenciada y tiene una maestría en Facultad de Ciencias, considera que la Olimpíada “está pensada con un fin de integración”. Esta idea es compartida por Bernardo Regusci, el joven uruguayo más premiado en la Olimpíada.
Bernardo es de Florida y desde hace tres años que participa de las pruebas nacionales. El primer año no le fue muy bien, el siguiente llegó al final y en esta ocasión viajó a la Olimpíada. Su liceo le permitió faltar a clases para ir a Montevideo a prepararse y también le financió los pasajes.
Regusci dijo a 180 que ya le gustaba la astronomía antes de tener la materia en el liceo y hasta consiguió su propio telescopio. “En Florida es medio difícil porque no hay un grupo de astronomía, pero el gusto propio está”, dijo.
“Estuvo muy lindo el intercambio con los demás países. Más allá de los premios y las pruebas, el intercambio con otros chiquilines de otros países es lo mejor porque te olvidás de que estás compitiendo y estás intercambiando, estás hablando con gente de tu edad que le gusta la astronomía”, contó.
Bernardo está cursando 6° de Ingeniería y le gustaría seguir algo relacionado con la astronomía, aunque entiende que es difícil: “Quiero seguir ingeniería en sistemas. Me encantaría hacer algo en relación con la astronomía pero el tema de la salida laboral es un poco complicado”.
