Al principio se habilitarán 100 pulseras. Los técnicos del ministerio explicaron que el agresor deberá concurrir a una dependencia judicial para la colocación de la pulsera y del GPS.
Las pulseras son removibles y se pueden romper pero cuando esto ocurre el sistema de seguridad automáticamente notifica al control de monitoreo ubicado en el Centro de Comando Unificado del Ministerio del Interior.
El ministro Eduardo Bonomi recordó que “la violencia doméstica representa más de la mitad de los delitos contra la persona y el segundo delito en importancia luego de los hurtos”. Además, agregó que “los homicidios más frecuentes son los que se originan en discusiones, disputas y riñas entre conocidos, producidos por violencia de género y violencia doméstica”.
El jerarca subrayó que “la gran mayoría de las muertes violentas se producen entre personas que tienen una relación de pleno conocimiento y en los espacios de mayor cercanía: familia, pareja, vecinos, amigos y compañeros de trabajo”.
Bonomi dijo que este sistema “no va a resolver la complejidad del problema ni erradicar los homicidios por violencia doméstica” porque lo que se necesita es un “cambio cultural”. Además, dijo que en “más de la mitad” de los casos, el agresor no tiene antecedentes previos.
Cómo funciona
El agresor lleva un dispositivo GPS y una pulsera, mientras que el agredido lleva el dispositivo GPS que tiene un botón de pánico. El aparato es parecido a un celular con GPS y transmite a través de la red GPRS de ANTEL.
Las pulseras tienen una vida útil de 12 meses, por lo que de 7 a 10 días antes a ese vencimiento se notifica al usuario que debe cambiarla. Las zonas perimetrales de inclusión y exclusión para agresores las define el Poder Judicial.
El sistema tiene tres tipos de alertas: cuando hay riesgo de vida, que requiere respuesta policial en forma inmediata; cuando no hay riesgo de vida pero requiere participación policial; y cuando se trata de un control rutinario.
También se alerta al agresor cuando está cerca de la víctima para que se retire de la zona. En ese momento, la víctima también recibe un aviso que informa que el agresor está cerca.
El próximo 22 de octubre comienzan los cursos de capacitación para los 12 operadores y 6 supervisores que trabajarán en el Centro de Comando Unificado.
