El jefe de Policía de Montevideo, Diego Fernández, contó a No toquen nada que este lunes se aplicó un operativo en el barrio Marconi como parte del Plan de Seguridad de Montevideo para el combate del delito. Fernández dijo que en la última semana hubo incidentes importantes en el barrio pero que ahora “puede decirse que está tranquilo”.
Fernández dijo que el miércoles una persona que vestía un chaleco antibalas robado a la Policía apareció muerta en el barrio, “producto presumiblemente de un enfrentamiento con la Policía” aunque esto todavía no se ha podido comprobar.
Por otra parte, el domingo a las dos de la tarde un grupo de personas rapiñaron una panadería de la zona. Fernández contó que cuando la Policía encontró una moto que había sido usada para la rapiña se acercó un grupo de siete personas que la estaban rodeando. “Cuando se estaba procediendo (a la detención de esas personas) hubo una desacato de proporciones”, dijo Fernández. El jefe de Policía explicó que los rapiñeros fueron detenidos, pero que algunos habitantes del barrio hirieron a policías con pedradas y que hubo disparos de armas de fuego, tanto de policías como de agresores.
Una hora más tarde falleció una persona en la policlínica local a causa de heridas producidas por arma de fuego, pero no se pudo determinar todavía si esto estuvo relacionado con el incidente anterior. “Se está realizando la autopsia para ver qué se puede determinar”, afirmó Fernández.
El jefe de Policía dijo que en respuesta a estos incidentes algunas personas del barrio cortaron la calle Aparicio Saravia y prendieron fuego algunos autos abandonados. Incluso interceptaron a dos taxistas que pasaban por el lugar, los obligaron a bajar y prendieron fuego sus coches, contó Fernández.
“Hubo una desobediencia civil muy importante, unas 50 personas de ambos sexos y de todas las edades”, especificó el jefe de Policía.
El operativo policial consistió en cortar el tránsito por Aparicio Saravia y en aplicar medidas de control de ingreso y egreso del barrio. “Se actúa con la Guardia Republicana, disolviendo a los que estaban allí, y de ese momento hasta ahora (lunes de mañana) el barrio puede decirse que está tranquilo”, contó Fernández. De todas maneras, aseguró, se continúa trabajando para determinar quiénes fueron los que participaron en el incidente de los autos incendiados y realizar “las detenciones correspondientes”, y para garantizar la seguridad del barrio.