A las 10 de la mañana del domingo Díaz comenzó su último entrenamiento con el plantel de Nacional. Lo hizo porque ya estaba estipulado pero con el semblante de alguien que sabe que tiene las horas contadas, según contó a 180 un testigo del movimiento.
Horas antes, tras el empate ante Cerro Largo, había puesto su cargo a disposición de la directiva, algo que será aceptado por unanimidad en la reunión del lunes.
“Le aceptamos la renuncia seguro”, comentó un directivo.
Los pobres resultados, el bajo funcionamiento y el rechazo de la hinchada hacia el DT fueron determinantes.
Según supo 180 algunos pocos dirigentes pensaron en un principio en la posibilidad que el DT planifique el partido ante Boca por la Libertadores el jueves, para darle una chance más, pero con el paso de las horas cambiaron de posición.
La intención de la directiva es que Hugo de León se haga cargo del equipo. “Es el anhelo de todos en Nacional”, dijo un dirigente. Todos los esfuerzos se centrarán en tratar de convencerlo para que acepte.