"No es un contacto sexual, es que me pongo más afectuoso"

Horacio De los Santos llegó a la Casita del Parque a las 22 horas y media hora después dijo que "no estaba en condiciones de discernir bien" por el alcohol que había tomado. Los testigos y las adolescentes declararon que él sentaba a las jóvenes en su falda y les "daba palmadas". El ex secretario general de la Intendencia de Paysandú dijo que no era un "contacto sexual", que cuando toma y canta se pone "más afectuoso".

Actualizado: 27 de agosto de 2013 —  Por: Emiliano Zecca

"No es un contacto sexual, es que me pongo más afectuoso"

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De los Santos fue procesado junto a una funcionaria de la intendencia por "contribución a la explotación sexual de personas menores de edad".

En el fallo de la jueza Karen Ramos se explicó que De los Santos cedió la Casita del Parque para la fiesta de su amigo y llegó al lugar cerca de las 22 horas.

El ex secretario general de la Intendencia de Paysandú declaró que llegó solo y en el lugar estaban un asador "medio brasilero" y la funcionaria de la intendencia, también procesada por la justicia.

Luego llegó su amigo con las adolescentes. "Fui a comer un asado y a tomar un whisky, entre las luces no me gustó el ambiente, algo que vi en las caras de los que estaban (...) Cuando llegaron las menores yo ya estaba tomando. No estaba en condiciones de discernir bien".

Su amigo llegó media hora después, pero De los Santos aseguró que él toma rápido. Cuando abandonó el lugar, lo hizo con 18,2 decigramos de alcohol por litro de sangre, según comprobó la policía en la espirometría que se le practicó.

El amigo de de los Santos le pedía a las jóvenes que "se acercaran y se sentaran en la falda". Así lo contó una de las jóvenes de 16 años que participó de la fiesta.

Un mujer de 25 años que asistió a la reunión y llegó sobre la medianoche, contó que en ese momento había unas 15 personas entre hombres y mujeres, whisky y dos botellas de champan. "Las menores tomaban pero no sé qué tomaron, mi amiga y yo nos sentimos incómodas porque las muchachas estaban pesadas, se sentaban en la falda del muchacho de la intendencia, se secreteaban (...) le tocaban la cara, le metían la mano en el bolsillo y él les daba palmadas en la cola, les acariciaba el pelo, les hablaba al oído y les daba besos en la cara", declaró.

De los Santos dijo que cuando toma y canta "no es un contacto sexual, es que me pongo más afectuoso (...) solo la agarraba de la cintura y de la cadera... solo estaba abrazado, ella me tocaba por arriba", dijo.

La jueza Ramos sostuvo en su fallo que "en este ambiente de promiscuidad y consumo de estupefacientes, De los Santos y la funcionaria disfrutaban de la reunión sin ofrecer reparos (...) y en determinado momento la funcionaria le dijo a una de ellas que podía sacarle plata a De los Santos por los actos sexuales o eróticos".

Según la joven de 17 años que declaró ante la justicia, la funcionaria la invitó a irse con ella y De los Santos para mantener relaciones sexuales. "Me propuso que vayamos los tres pero que yo no esté con él. Ella me dijo que me iba a hacer cosas a mí y después ella iba a tener sexo con él", contó.

La funcionaria le pidió a De los Santos 1.500 pesos para ella y 500 para la joven de 17 años que aceptó. "Ella me iba a hacer algo a mí mientras De los Santos miraba", dijo la adolescente.

Los tres fueron detenidos por la policía esa misma noche cuando se iban de la Casita del Parque. Según la jueza, "ninguno de los imputados pudo explicar a qué iba la adolescente, no pudieron brindar una explicación coherente sobre las causas por las que iba con ellos en el auto" y por qué la abandonaron cuando los interceptó la policía.

La defensa de De los Santos argumentó que el funcionario no sabía a qué tipo de fiesta iba, que incluso había ofrecido su casa, y que no pertenecía al círculo de encuentros organizado por su amigo.

Pero la jueza Ramos concluyó que las adolescentes "no tienen animosidad" de incriminar a los funcionarios con sus declaraciones. "Por el contrario, las versiones de los encausados no son completas, carecen de sustento en ciertos aspectos, no guardan coherencia", afirmó en el fallo.

En el fallo se concluyó que "las nuevas declaraciones recabadas en autos, anudadas a las declaraciones anteriores al procesamiento de los encuestados, contribuyen a conformar a juicio de esta decisora, los elementos de convicción suficientes acerca de la participación de ambos en el delito de contribución a la explotación sexual de personas menores de edad".