"Me dí cuenta inmediatamente, apenas ocurrió. Cuando Godín anotó, grité "Gol", pero por dentro todo era oscuridad. Estaba feliz porque habíamos marcado y contento por mis compañeros porque íbamos a clasificar, pero no quería pensar más. Pensar equivalía a aceptar lo que había hecho y las consecuencias relacionadas". Así comienza la autobiografía de Luis Suárez titulada "Mi vida" y presentada por editorial Planeta.
"Había defraudado a la gente", reconoció Suárez. En el vestuario "no podía mirar" a sus compañeros ni a Tabárez. "No sabía cómo disculparme con ellos", señaló.
"Pasarían dos días antes de que tuviera que irme de Brasil pero en mi cabeza ya me había ido", expresó.
Al día siguiente Tabárez lo llamó. "Esto es lo peor que he tenido que comunicarle a un jugador", le dijo, y le dio la noticia de que la suspensión era de nueve partidos y que tenía que abandonar la concentración.
"Me trataron peor que a un criminal", consideró. "¿Prohibirme acudir a partidos de baby fútbol para ver a mis sobrinos de nueve y diez años? ¿Decirme que no puedo ir a trabajar? Me parece increíble (...) que el poder de la FIFA pudiera llegar tan lejos", agregó.
"Tal vez yo era un blanco fácil, pero había algo importante que debía reconocer: yo mismo me había convertido en un blanco fácil", reconoció Suárez. "Yo cometí el error y fue mi culpa. Fue la tercera vez que ocurrió. Necesitaba trabajar este tema con la gente adecuada. Necesitaba ayuda", añadió.
Según Suárez "una mordedura escandaliza a muchos, pero es relativamente inofensivo".
"Momentos antes de morder a Chiellini tuve una gran ocasión para adelantarnos 1-0. Si hubiera marcado, si Buffon no hubiera hecho la atajada, lo que siguió no hubiera ocurrido", señaló.
El goleador explicó que "durante 90 minutos en la cancha, la vida es irritante". "Me irrito cuando un defensa se acerca y me empuja desde atrás. Es normal, porque juego de espaldas al arco y retrocedo contra él, pero me irrita. Me irrito cuando fallo oportunidades de gol. Todo me irrita", expresó.
"Parece extraño que lo diga después de un tercer incidente, pero he mejorado", dice Suárez. "Estoy más calmo y más maduro", reconoció.
