La última respuesta de la conferencia de prensa de Tabárez estuvo fuera de agenda. El técnico habló de un sillón que está en el Complejo y de una historia que involucra a García. El ex jugador que debutó en Danubio, entrenó en el Chelsea, estuvo en la selección y pasó por Cerro, está procesado por el homicidio de su padre e internado en el Vilardebó luego de una pericia psiquiátrica.
Contó Tabárez que su hija Tania le reenvió un mail de una periodista vinculada a la sala 12 del Vilardebó, en la que están los internos siquiátricos imputados. Ellos, a partir del sillón en el que se sentó el rey de España cuando visitó al ex presidente José Mujica, hicieron un banco con la bandera de Uruguay, con la idea de que estuviera en el Complejo antes de la Copa América.
“Entre los internos apareció un nombre Jorge García y yo le pregunté a mi hija si no era el jugador de fútbol. A la hora me confirmó que sí, que era”, dijo el entrenador. “Fuimos a visitarlo y fue una experiencia muy fuerte pero muy significativa, tuve la posibilidad de ver a Jorge García, un gran jugador de fútbol, con inconvenientes que trae la vida, que obstaculizaron la proyección que tenía por sus condiciones como futbolista”, comentó.
Para el técnico fue “una prueba” de que “cómo el fútbol puede motivar para que la vida de esas personas siga sin abandonarlos a su suerte y a su posible empeoramiento sino darle armas para que tengan una vida lo más digna posible”.