Vázquez reclamó “voluntad política” mundial contra el tabaco

El presidente Tabaré Vázquez pidió “voluntad política” internacional en la lucha contra el tabaquismo en su discurso ante la 70a. Asamblea General de Naciones Unidas. Además, se refirió al flagelo de los desplazados y abogó por el fin del embargo a Cuba.

Actualizado: 29 de setiembre de 2015 —  Por: Redacción 180

El presidente uruguayo definió que “el auténtico progeso no es que unos pocos vayan adelante y la mayoría quede atrás, sino avanzar juntos sin que nadie se rezague”. En ese sentido, llamó a evitar “la tragedia” que padecen miles de desplazados en el mundo enfrentando las causas de ese “flagelo”.

Dijo que es necesario prevenirlo “reconociendo a los demás como un semejante (que es mucho más que 'tolerar'), respetando y promoviendo sus derechos (todos los derechos), apostando a la democracia como forma de gobierno y estado de la sociedad; educando y formando para la vida digna, el trabajo decente y para la ciudadanía plena”.

También instó a respetar el planeta. “Si continuamos destruyendo este mundo, en lo inmediato, la humanidad no tiene donde vivir”, dijo.

Vázquez rechazó “todo tipo de terrorismo y de discriminación”.

Luego destacó que la salud pública “es un componente esencial de la soberanía de las naciones”. Allí comenzó a referirse a la demanda de la tabacalera Phillips Morris contra Uruguay y la "brutal epidemia" de cáncer que si no se ataca puede generar más muertes que la Segunda Guerra Mundial.

"Estamos antes una brutal pandemia (...) como nunca antes la humanidad conoció", dijo Vázquez, alertando sobre el crecimiento de enfermedades no transmisibles como las cardiovasculares, respiratorias, diabetes o cáncer.

"Queda mucho por hacer", afirmó.

Según cálculos citados por el presidente uruguayo, el cáncer en América Latina genera 4.500 millones de dólares anuales de gastos directos en consultas, diagnósticos y tratamientos. Los países deberían usar ese dinero en esfuerzos de diagnóstico temprano y en políticas públicas en salud, educación y vivienda, para evitar más muertes, señaló.

"Para 2030 un millón de latinoamericanos morirán solo de cáncer y más de 7 millones en el mundo (...) Va a matar al año a más personas que las que mató la Segunda Guerra Mundial", advirtió.

El mandatario también pidió incluir el tabaco y el alcohol en las estrategias mundiales de combate a las drogas, señalando que aunque "no es sencillo" es "posible regular esos mercados" evitando un enfoque "prohibicionista y respetando el derecho de las personas".

El presidente reclamó la voluntad política internacional en este asunto porque "ningún avance se logra en soledad" y se refirió a la demanda de la tabacalera Philip Morris contra Uruguay.

“La voluntad política, en este caso, más que un dilema ideológico, es una cuestión ética”, señaló. Y agregó: “no es ético que en algunas circunstancias, tribunales de organismos multinacionales, puedan priorizar aspectos comerciales a la defensa de un Derecho Humano fundamental como es la salud y la vida”.

"Uruguay está sufriendo esto", dijo. "Una poderosa tabacalera internacional de la que voy a decir solo sus iniciales para no lesionar ninguna sensibilidad, Philip Moris, ha hecho una demanda internacional contra Uruguay por aplicar el Marco de Control del Tabaquismo de la Organización Mundial de la Salud", afirmó y fue aplaudido por la asamblea.

"Quizás porque somos un país pequeño hemos sido escogidos", afirmó. "Quizás sea no solamente para castigar a Uruguay sino para que otros países del mundo no sigan el camino que ha tomado Uruguay para luchar contra el tabaco y darle más calidad de vida a su gente", afirmó.