“Ojalá sirva como ejemplo para el mundo y para América Latina. Sin lugar a dudas, es un ejemplo más que fuerte para el Uruguay”, dijo Martínez Burlé a Subrayado.
Este martes, Juan María Bordaberry fue notificado por la jueza penal Mariana Motta acerca de su condena de 30 años de prisión, por los delitos de atentado a la Constitución, nueve delitos de desaparición forzada y dos delitos de homicidio.
El delito de atentado a la Constitución establece -explicó la abogada- “que a la persona se le considera 'reo de lesa nación'. “Ahí está dando la contundencia de lo que significa violar la Constitución. No se puede violar la Constitución y salir impune, no se puede”.
Martínez Burlé reflexionó sobre el resultado de este proceso, que comenzó hace ocho años cuando presentó la denuncia junto al doctor Walter De León. “Se logró que por fin se lo condenara por atentado a la Constitución, que es el delito más grave que se puede cometer. Yo le llamo la madre de todos los delitos. Sin lugar a dudas la Constitución es nuestra ley superior, está por encima de todo y lo que preserva es la nación; cuando se viola ese concepto, dentro de ese concepto caben todas las demás violaciones, a los derechos humanos, los homicidios, las torturas que pueden imputársele a Bordaberry”.
Explicó que esta condena no le agrega ni le quita un día de prisión, pero aclaró que ese nunca fue el interés de los demandantes. Lo que buscaban, señaló, es que Uruguay, “que siempre fue el gran mentor de la democracia a nivel mundial antes de la dictadura, vuelva otra vez a dar el ejemplo”.
Esta condena sirve, puntualizó, “para que cuando alguien quiera dar un golpe de Estado, piense un poco; quizá tal vez da un golpe de Estado hoy pero mañana puede estar, como en el caso de Bordaberry, terminando sus días en la cárcel, denigrado”.